Patricia FLORESCorresponsalAdemás de los 18 árboles que se derribaron en San Lorenzo para la remodelación de la entrada a Tehuacán, también se han otorgado más permisos a las constructoras para talar aún más en distintos puntos donde se hará adoquinamiento o encarpetamiento, admitió la regidora de Ecología, Claudia Orozco López. La funcionaria expresó que la indicación a la Dirección de Ecología es evitar al máximo el derribo de árboles, ya que son necesarios para cuidar el ambiente y la calidad del oxigeno; sin embargo, en ocasiones es inevitable que tengan que ser cortados porque se sembraron en lugares poco adecuados, donde al paso del tiempo pasarían caminos o calles. Indicó que sin importar quién solicite el derribo de un árbol, el estudio se hace y se debe pactar el compromiso de que al final de la obra, la persona o empresa deberá reforestar, pues sólo así se puede contrarrestar un poco el daño causado; no obstante, admitió que la situación a veces puede causar molestia en los ciudadanos. Explicó que para que esto no pase se hace también una evaluación de los lugares donde se van a sembrar los nuevos ejemplares, de modo que a largo plazo no se tenga el mismo problema con los árboles anteriores; asimismo, dijo que la planeación es importante porque en algunos años esos ejemplares podrían ser derribados por otra obra. Dijo que en tiempos recientes en la 16 Poniente se tuvieron que derribar 2 árboles, además de que esa tendencia se da en otros puntos de la ciudad y agregó que de la misma forma en que se dan los permisos también se otorgan autorizaciones para que las nuevas colonias y fraccionamientos contemplen espacios verdes. Reconoció que es muy difícil que todos los días la Dirección de Ecología los riegue y que no siempre se le da el seguimiento respectivo a los arboles sembrados, pero apeló a la conciencia ciudadana para que adopten un árbol. Agregó que luego de la plaga de hongo negro que ha diezmado los laureles de la india, que eran los más populares en la ciudad, se han buscado otras opciones como el fresno, el pirul brasileño y el amate, pero este último no se encuentra en la comunidad y es difícil su transporte.