Martes 09 Agosto 2016

La hecatombe que dejó la tormenta tropical Earl en Huauchinango acercó a los pobladores de las comunidades más afectadas y a la vez, los alejó de los apoyos gubernamentales que llegaron a donde no son necesarios.

En la localidad de Papatlazolco, la ayuda fue negada por el propio gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, a pesar de que dos casas particulares, dos escuelas y tres iglesias se acondicionaron como albergues para apoyar a sus vecinos de la junta auxiliar de Xaltepec, la cual casi desapareció.

El pasado domingo, después de la tromba que azotó Xaltepec, la cual dejó 11 personas muertas, 8 menores y 3 adultos, el gobernador visitó el albergue de la escuela "Amado Nervo" en Papatlazolco; allí, las encargadas del lugar pidieron apoyo al mandatario, quien lo negó de forma rotunda, pues dijo que el albergue establecido era el del Instituto Tecnológico Superior de Huauchinango.

En las dos escuelas públicas y tres iglesias de Papatlazolco han pernoctado al menos mil 200 personas y se espera que continúen dos semanas más, según dijeron las encargadas de los albergues, Ana Karina Juárez y Citlalli Juárez.

Para las voluntarias de esta comunidad, la tormenta unió a los pueblos que dejaron de lado sus diferencias y creencias religiosas para apoyarse en labores de cocina, limpieza y suministro de medicinas.

"Se le pidió al gobernador, que nos mandara víveres para la cocina que se instaló aquí en la iglesia y nos dijo que no nos iba a mandar nada, porque ya se instaló un albergue en el Tecnológico. A nosotras nos dijeron que moviéramos a la gente, que les notificáramos, pero les dijimos que no los podemos correr. Muchos se quedaron y ellos insistieron en que el apoyo no llegaría acá", dijo Ana Karina.

Su hermana agregó que desde la mañana del domingo, sus vecinos de Xaltepec acudieron a ellos y lo que se les ocurrió fue implementar las iglesias y las escuelas; después, tras la visita del gobernador al filo del mediodía, llegaron bultos de ropa y colchonetas, pero luego se las quitaron para llevárselas al tecnológico.

"Había llegado el apoyo, cuando llegó el gobernador, llegaron las colchonetas, se fue el gobernador y se fueron las colchonetas. Por lástima nos dejaron sólo 50. Nos dijeron que aquí no era albergue, que la gente no se podía quedar aquí y que los teníamos que convencer, pero no se puede", puntualizó Citlalli.

Junto con las dos hermanas, trabaja un grupo de ocho mujeres, que regularmente trabajan en las iglesias, dos pentecostales y una católica; pero ahora, el sentimiento de apoyo las ha unido.

La decena de mujeres se dividió en dos grupos, cuatro se quedaron en la cocina instalada en el atrio de la iglesia católica y las otras seis se dividieron en los cinco albergues, así aseguran que para los mil 200 exista apoyo y comida en el tiempo que sea necesario.

"Es de parte de las localidades, no de parte del gobierno, porque no nos quiso apoyar. Ahorita tenemos apoyos pero de los pueblos, nosotros mismos, la misma gente es la que está apoyando", señaló Adelina Franco Morales, una de las encargadas de la cocina.

Las mujeres resumieron que los albergues de Papatlazolco han resultado más benéficos que los instalados en la cabecera municipal de Huauchinango, a casi una hora de camino desde Xaltepec.

Mientras, en estas juntas auxiliares los vecinos se apoyan; el gobernador recorrió el albergue del Instituto Tecnológico, desde donde dijo que se tiene apoyo para 500 familias; sin embargo, los salones de este centro educativo permanecían semivacíos.

Además, el ayuntamiento de Huauchinango instaló otros albergues en el Centro de Convenciones Catalina, el DIF municipal y el Palacio del Deporte, todos en la cabecera municipal.