En el municipio de San Pedro Cholula hay un conflicto vecinal que data de hace cuatro años, cuando los descendientes de Francisco Flores bloquearon el paso en la que hasta entonces era la calle 32 Oriente, en el barrio de Jesús Tlatempa.

Durante este tiempo, la controversia por el cierre de la vialidad ha ido escalando entre las diferentes partes sin que el gobierno municipal intervenga para remediarlo. Por el contrario, los vecinos afirman que la administración saliente se deslindó declarándolo un conflicto entre particulares.

"Primero pusieron la barda de atrás, luego hace dos años colocaron una reja y ahora la último es que a esa reja ya le pusieron púas", afirma Lázaro Martínez, quien relata cómo es que al morir el señor Flores, sus hijos se encargaron de privatizar el espacio público.

Desde el 5 de agosto de 2014, la familia Martínez ha dirigido escritos al entonces presidente municipal José Juan Espinosa Torres, al síndico de San Pedro, el titular de Desarrollo Urbano y el cuerpo de regidores solicitando la apertura de la calle. En todas las ocasiones fueron desestimados.

De acuerdo con testimonios de quienes habitan en la zona desde hace 35 años, la calle permitía el acceso de vehículos y trabajadores de una empresa metalúrgica que se ubica en las inmediaciones pero ahora, el bloqueo a través de bardas ha provocado que incluso otro vecino tenga que ingresar a su propia vivienda por medio de la casa de su tía.

"Desde hace cuatro años hemos buscado al Ayuntamiento y no nos han hecho caso. Sí les permitieron primero hacer la barda de atrás y luego la de enfrente con reja, cuando clausuraron oficialmente la calle. Inclusive atrás está nuestro vecino que es dueño del lote 6 y ya no tiene paso para su casa", afirma la señora Rosa María Zanella.

Mediante 19 escritos, los afectados se han dirigido a la autoridad de San Pedro Cholula sin lograr que ésta intervenga. Incluso han denunciado ante la Fiscalía y la Comisión Estatal de Derechos Humanos, organismos que tampoco han podido mediar en el asunto.

La última respuesta de la autoridad ocurrió el pasado 5 de septiembre, cuando el Ayuntamiento de San Pedro Cholula se declaró formalmente incompetente, alegando que no podía intervenir sin mandato judicial.

"Ahora en septiembre la presidenta municipal fue que contestó porque también pusimos una queja en Derechos Humanos y entonces aquí nos dicen que no es competencia de este gobierno abrir esta calle", denuncia Zanella.

Por esta razón la convivencia entre los vecinos involucrados se ha vuelto cada vez más difícil. Los afectados esperan que el próximo presidente municipal, Luis Alberto Arriaga Lila, quien se comprometió en campaña a mediar en el caso, cumpla su palabra.