Mujer pide a la Virgen reunirse con sus hijos

La fe y la devoción hacia la Virgen de Guadalupe de los mexicanos es tan grande que provoca que en este día 12 de diciembre se vivan milagros, como el que espera Luz, una joven madre, quien a muy temprana edad vivió el horror de la violencia doméstica por parte de su exesposo y los parientes de éste.

Luz platicó que durante varios años soportó humillaciones, golpes y malos tratos, todo por sus hijos, hasta que un día decidió dejar atrás su sufrimiento y, con ayuda de su madre, comenzó una nueva vida al lado de sus trillizos de tres años. Recuerda que fue un 12 de diciembre cuando dio ese paso.

Con los ojos brillosos por las lágrimas a punto de salir, comenzó a narrar que cuando estaba frente a la virgen de su colonia agradeciendo ser libre de los golpes, llegó su entonces esposo y la arrastró con fuerza hasta la calle, donde comenzó a golpearla, mientras que sus hijos eran jaloneados por las hermanas de él.

Tras ser golpeada, fue arrestada por la autoridad municipal y tuvo que pagar una fianza si quería salir; sin embargo, se dio cuenta que las acciones de los involucrados fueron para dar tiempo a que su expareja saliera del municipio llevándose a sus hijos.

Desde entonces ha vivido un calvario constante y, en este punto de su vida, no quiso saber más de la Guadalupana.

Su madre, de nombre Guadalupe, fue quien le devolvió la esperanza para seguir buscando ese milagro por la Reina de México, pero poco después, ella quien era su pilar de apoyo para seguir la lucha contra esas personas que le robaron la felicidad, murió.

Su hermana, Paola, continuó el relato al ver cómo Luz comenzaba a sollozar: "Ha sufrido mucho, ya que cuando perdió a sus tres hijos, tan sólo tenían unos meses de haber nacido, necesitaban mucho de ella. (…) Hoy ellos tienen tres años y Luz está sumida en una fuerte depresión, intentó privarse de la vida; sin embargo, dijo que vio a mi mamá acompañada de la Morenita del Tepeyac. Afortunadamente, logramos salvarla y desde entonces está segura que ella, (La Virgen de Guadalupe) le hará el milagro".

Luz se incorporó otra vez a la plática y expresó que su fe creció desde ese día. Aunque todavía está sumida en una fuerte depresión, fue a arrodillarse frente a la Guadalupana en su día para pedir entre lágrimas que sus tres pequeños regresen con ella, o que por lo menos pueda verlos.

Resaltó que es poco frecuenta que salga a la calle, y este 12 de diciembre, sólo vio el contraste entre lo que ella vive y lo que otros, a quienes se les cumplieron sus milagros, agradecen. Así, con una leve sonrisa, levantó la mirada hacia el cielo diciendo "Mamá y Virgencita, si mis hijos regresaran a mí, que lo hagan ya, y si no será así, llévenme con ustedes".