Indígenas de diversas partes del municipio se manifestaron de manera pacífica a las afueras del Hospital General de Cuetzalan para informarse sobre la segunda recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en diciembre pasado por la inadecuada atención que se brinda en este nosocomio y externar su preocupación por la prestación de servicios de salud en este municipio, ocasionada por los cambios en el gobierno estatal.

Cerca de 70 indígenas y campesinos del Movimiento Independiente Obrero Campesino Urbano Popular (MIOCUP), se manifestaron al a las afueras de este nosocomio llevando cartulinas que exigían mejores servicios de salud.

Debe recordarse que, por el caso de violación al derecho a la protección de la salud e interés superior de la niñez, así como por la inadecuada atención médica en agravio de una adolescente indígena por parte de la Secretaría de salud del Estado en este municipio, la CNDH emitió la segunda recomendación a este hospital bajo el numeral 81/2018.

En esta segunda recomendación, la Comisión destaca las condiciones de rezago social, pobreza y falta de acceso a los servicios de salud, no obstante, el manifiesto de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en el sentido de que el derecho a la protección de la salud debe entenderse como una garantía fundamental e indispensable para el ejercicio de los demás derechos humanos, no sólo como el derecho a estar sano.

La CNDH advirtió que hay incumplimiento del hospital en las obligaciones de disponibilidad y calidad de los servicios de salud, al detectar inconsistencias, omisiones y con elevaciones en la prestación de la atención médica y por no contar con elementos esenciales en el hospital general para su eficaz desempeño, como medicinas, equipo médico y análisis de laboratorio, así como la falta de disposición inmediata de la ambulancia y personal médico especializado en ginecología y obstetricia, lo que permite acreditar la responsabilidad institucional que contraviene los estándares nacionales e internacionales en materia de salud.

Con esta recomendación, se pueden acreditar cinco casos de violencia obstétrica por estas mismas causas, que ya han derivado en dos recomendaciones por la CNDH, mientras que la Comisión de derechos humanos en el Estado de Puebla no ha ocurrido ninguna recomendación o intervención para evitar la ocurrencia de nuevos casos, desde 2016.

Esta segunda recomendación es por el caso de la menor Marisol, quien en ese entonces contaba con 16 años de edad, por haber esperado casi 100 horas para ser atendida en las labores de parto, en hechos que ocurrieron a finales de septiembre de 2017, en las condiciones que coinciden exactamente con las recomendaciones que ya había pedido la CNDH evitar para asegurar que esta clase de negligencias se repitieran, de acuerdo a la recomendación 54/2016.