Sin justicia, la madrugada de este lunes falleció Maribel González Hernández, de 20 años de edad que había permanecido casi nueve meses internada en el Hospital General de Zacatlán tras haber sufrido un accidente el pasado 2 de julio, y del que la autoridad ministerial poco hizo para sancionar a los responsables.

Maribel resistió 300 días, más de 7 mil 200 horas internada en Zacatlán, luego de haber sido trasladada de la capital poblana, donde permaneció casi un mes.

Desde diciembre pasado la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de Puebla inició –de oficio– la investigación sobre caso y brindó acompañamiento legal a los familiares.

Saúl Cerón y su esposa Maribel no se hicieron responsables de los gastos médicos de la compensación correspondiente a los daños que ocasionaron cuando conducían, aparentemente, en estado de ebriedad. Aun con las agravantes, el Ministerio Público encargado de la investigación del caso había sido criticado por su lenta y deficiente actuación.

La madrugada de ayer lunes Maribel falleció, a pesar de los esfuerzos médicos y el equipo, valuado en poco más de 200 mil pesos, que pusieron a su disposición para asistir la respiración y otras funciones que quedaron como secuela de aquel accidente.

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En entrevista con El Popular, diario imparcial de Puebla (en diferentes ocasiones), la madre de la afectada señaló que los responsables del accidente no hicieron nada por apoyar a Maribel, y fue su familia la que consiguió dinero para colchones de aire, medicamentos y otras cosas que les pedían. Con su muerte, Maribel deja a un hijo en la orfandad.

A lo largo de las varias notas publicadas en este medio, el pasado 29 de noviembre pasado se narró que el accidente ocurrió el 2 de julio de 2018, cuando una camioneta blanca chocó el modesto automóvil gris donde viajaba Maribel, una joven de entonces 19 años de edad, y madre de un niño de poco más de un año. Fue trasladada a la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Chignahuapan.

Por la gravedad de su condición, fue trasladada a la capital poblana, donde permaneció casi un mes; después fue llevada al Hospital General de Zacatlán, donde llevaba casi nueve meses. Para los padres de Maribel, la impresión más fuerte fue cuando la vieron entubada.

Durante los pasados nueve meses "nunca he visto que el señor haga algo por Maribel, nada; habla con mi esposo (papá de la joven), pero no se ha hecho responsable," dijo uno de los entrevistados.

La abogada del caso solamente había pedido la reparación de los daños y la respuesta solamente fue la promesa de apoyo con los gastos médicos, no así de los alimentos o lo requerido para cuidar a Maribel.