Liberan y recapturan a presunto implicado en caso Ayotzinapa
El Mochomo es señalado como uno de los jefes del cartel de Guerreros Unidos, quienes presuntamente asesinaron a 43 estudiantes en 2014.
Este miércoles el juez liberó, por falta de elementos, a José Ángel Casarrubias Salgado, alias "El Mochomo" implicado en el caso de Ayotzinapa, aunque fue recapturado de inmediato, informaron fuentes federales. Casarrubias dejó el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el municipio de Almoloya de Juárez, estado de México, y agentes de la Fiscalía General de la República (FGR) de México ya lo esperaban con una nueva orden de presentación, indicaron. Al llegar al estacionamiento del penal donde lo esperaban familiares y abogados, Casarrubias fue detenido con una orden de presentación de un Ministerio Público Federal de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO). Casarrubias Salgado es señalado como uno de los jefes del cartel de Guerreros Unidos y uno de los principales sospechosos en la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa la noche del 26 de septiembre del 2014 en Iguala, estado de Guerrero. Las autoridades lo capturaron el 24 de junio en el Estado de México mediante una orden emitida por un juez federal de la misma entidad. También lee: Ataque en Irapuato deja 24 muertosJose Ángel es hermano de Sidronio Casarrubias Salgado, también líder del cartel Guerreros Unidos que fue detenido en 2014 y quien confesó que el grupo participó en la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa. La FGR ordenó esta semana la detención de 46 funcionarios del estado de Guerrero por su presunta relación con la desaparición de los 43 estudiantes, en una nueva "etapa" de la investigación que ha dejado atrás la primera versión construida por el gobierno pasado. A inicios de marzo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, firmó un acuerdo con la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y la FGR para esclarecer la desaparición de los estudiantes. Según la versión oficial del Gobierno del entonces presidente de México, Enrique Peña Nieto, los asesinaron e incineraron sus restos en un vertedero de basura. Investigadores independientes descartaron la posibilidad de que fueran incinerados los cuerpos y el actual Gobierno mexicano, reabrió las investigaciones y busca aclarar la desaparición |