**Aunque el gobierno otorga los aparatos auditivos de manera gratuita, cumplir con el trámite y los requisitos es complicado, señalan Karen MEZA  La falta de estudios de audiometría limita a las personas con discapacidad a recibir equipos médicos que proporciona el gobierno del estado, a través del sistema estatal DIF y Fundación Telmex. Si bien, los equipos son gratuitos, cumplir con el trámite y los requisitos es “complicado”, expresó Maricela “H”, una de las madres beneficiadas ayer con la entrega de 400 auxiliares auditivos. La madre proveniente Acatzingo informó que parte de los requisitos para obtener un aparato auditivo son una fotografía, copia del acta de nacimiento, además de una valoración médica de audiometría no mayor de tres meses, con un costo mayor a 200 pesos. Expresó que el sistema municipal DIF no cuenta con los instrumentos médicos para recibir este certificado de salud, que determina la acucia de cada oído y, con ello, verifican el daño auditivo. “En Acatzingo no tenemos este servicio, tenemos que ir al CREE, ahí se paga alrededor de 250 pesos o más, todo depende del estado socioeconómico de cada uno de los padres”, agregó. En esta situación también se encuentran los ciudadanos provenientes de otros municipios como Zacatlán y Pahuatlán. En la entrega de equipos se benefició a 201 personas provenientes de 85 municipios. Los ciudadanos viajaron hasta tres horas para recibir su equipo auditivo, además tuvieron que esperar otra dos para que el gobernador Rafael Moreno Valle y su esposa Martha Erika dieran el equipamiento. Eran cerca de las 10:30 horas, Dulce Rosas salió de las instalaciones del DIF para comprar un par de tamales y atole, para que su hijo de 11 años desayunara. La madre explicó que es originaria de Xochimilco, una colonia que se encuentra a media hora del municipio de Pahuatlán; su niña concluyó hace unos días el quinto año de nivel primaria. Madre de tres hijos más y de oficio artesana dijo sentirse muy feliz, porque su hija escucharía después de tanto tiempo. “Son cuatro horas y 30 minutos de viaje, salimos desde las 4 horas, para estar puntuales, aquí llegamos a las 8 horas y sin comer”, expresó en tono molesta, al darse cuenta que había pasado media hora y el mandatario estatal no llegaba. |
La falta de estudios de audiometría limita a las personas con discapacidad a recibir equipos médicos que proporciona el gobierno del estado, a través del sistema estatal DIF y Fundación Telmex. Si bien, los equipos son gratuitos, cumplir con el trámite y los requisitos es “complicado”, expresó Maricela “H”, una de las madres beneficiadas ayer con la entrega de 400 auxiliares auditivos. La madre proveniente Acatzingo informó que parte de los requisitos para obtener un aparato auditivo son una fotografía, copia del acta de nacimiento, además de una valoración médica de audiometría no mayor de tres meses, con un costo mayor a 200 pesos. Expresó que el sistema municipal DIF no cuenta con los instrumentos médicos para recibir este certificado de salud, que determina la acucia de cada oído y, con ello, verifican el daño auditivo. “En Acatzingo no tenemos este servicio, tenemos que ir al CREE, ahí se paga alrededor de 250 pesos o más, todo depende del estado socioeconómico de cada uno de los padres”, agregó. En esta situación también se encuentran los ciudadanos provenientes de otros municipios como Zacatlán y Pahuatlán. En la entrega de equipos se benefició a 201 personas provenientes de 85 municipios. Los ciudadanos viajaron hasta tres horas para recibir su equipo auditivo, además tuvieron que esperar otra dos para que el gobernador Rafael Moreno Valle y su esposa Martha Erika dieran el equipamiento. Eran cerca de las 10:30 horas, Dulce Rosas salió de las instalaciones del DIF para comprar un par de tamales y atole, para que su hijo de 11 años desayunara. La madre explicó que es originaria de Xochimilco, una colonia que se encuentra a media hora del municipio de Pahuatlán; su niña concluyó hace unos días el quinto año de nivel primaria. Madre de tres hijos más y de oficio artesana dijo sentirse muy feliz, porque su hija escucharía después de tanto tiempo. “Son cuatro horas y 30 minutos de viaje, salimos desde las 4 horas, para estar puntuales, aquí llegamos a las 8 horas y sin comer”, expresó en tono molesta, al darse cuenta que había pasado media hora y el mandatario estatal no llegaba.