**A través de la denominación de origen, Canirac busca salvaguardar su elaboración Agencia Notimex  Hasta el 30 de septiembre se servirán los tradicionales Chiles en nogada, platillo distintivo de la cocina poblana caracterizado por la combinación de sabores dulces y salados, adornado con los colores patrios. A partir de julio, cuando comienza la cosecha de los principales ingredientes del platillo, que son chile poblano, manzana, pera, durazno criollo, entre otros, comienza la preparación de este platillo barroco en cientos de restaurantes, cocinas económicas y casas particulares. Javier Cué de la Fuente, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en Puebla, comentó que el tema de la denominación de origen es una forma de salvaguardar la elaboración de este producto. “En el campo hay muchos factores que van alterar los sabores y la consistencia de un producto; factores de altitud, de agua, de temporada, de la misma tierra de labor”, manifestó. “El chile poblano se puede plantar en otras regiones del país y se va a producir, pero será diferente el sabor a los que se cultivan en el campo poblano”, citó. Por cuarto año consecutivo la Canirac lleva a cabo esta campaña de promoción y difusión, con una inversión de un millón de pesos, que tiene como objetivo posicionar al estado de Puebla como un destino gastronómico y, a través de diversas promociones, incentivar el consumo en los 18 restaurantes afiliados a la Canirac. Los Chiles en nogada es un platillo barroco, conocido a nivel nacional e internacional por sus ingredientes y presentación final, que incluye los tres colores del Lábaro Patrio, como lo es el verde del cilantro, el blanco de la nogada y el rojo de la granada. Este año se estima una elaboración de 3 millones de Chiles en nogada durante la temporada; los comensales pueden adquirir este platillo a precios que van desde los 80 pesos hasta los 350 pesos, dependiendo del establecimiento y tipo de servicio. El alto costo también se deriva de la preparación artesanal del producto y del costo de los insumos, pues el kilogramo de la nuez de castilla tiene un precio estimado de 600 pesos. La calidad de los chiles en nogada va en aumento, ya que se han preocupado por ofrecer cada vez más un mejor platillo, que cumpla con las características originales de cuando se creó, en agosto de 1821, cuando las religiosas del convento de Santa Mónica crearon el platillo en honor a don Agustín de Iturbide. Por la tarde, mejor El titular de la dirección de Turismo del ayuntamiento de Puebla, Alejandro Cañedo Priesca, sugirió que el chile en nogada no es para el desayuno, sino para la comida, pero el turista que viene de otros estados o países, tanto escucha del platillo que se le antoja probarlo a cualquier hora. Incluso, el turista extranjero puede pensar que el platillo se sirve todo el año, pero el gastronómico sabe que sólo de julio a septiembre se degusta el original. Este año esperan 335 mil visitantes, con una derrama económica de 320 millones de pesos, considerando con las cifras registradas en el verano del año pasado. Vienen de todo el país, 20 por ciento del Valle de México y el resto de otras entidades. |
Hasta el 30 de septiembre se servirán los tradicionales Chiles en nogada, platillo distintivo de la cocina poblana caracterizado por la combinación de sabores dulces y salados, adornado con los colores patrios. A partir de julio, cuando comienza la cosecha de los principales ingredientes del platillo, que son chile poblano, manzana, pera, durazno criollo, entre otros, comienza la preparación de este platillo barroco en cientos de restaurantes, cocinas económicas y casas particulares. Javier Cué de la Fuente, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) en Puebla, comentó que el tema de la denominación de origen es una forma de salvaguardar la elaboración de este producto. “En el campo hay muchos factores que van alterar los sabores y la consistencia de un producto; factores de altitud, de agua, de temporada, de la misma tierra de labor”, manifestó. “El chile poblano se puede plantar en otras regiones del país y se va a producir, pero será diferente el sabor a los que se cultivan en el campo poblano”, citó. Por cuarto año consecutivo la Canirac lleva a cabo esta campaña de promoción y difusión, con una inversión de un millón de pesos, que tiene como objetivo posicionar al estado de Puebla como un destino gastronómico y, a través de diversas promociones, incentivar el consumo en los 18 restaurantes afiliados a la Canirac. Los Chiles en nogada es un platillo barroco, conocido a nivel nacional e internacional por sus ingredientes y presentación final, que incluye los tres colores del Lábaro Patrio, como lo es el verde del cilantro, el blanco de la nogada y el rojo de la granada. Este año se estima una elaboración de 3 millones de Chiles en nogada durante la temporada; los comensales pueden adquirir este platillo a precios que van desde los 80 pesos hasta los 350 pesos, dependiendo del establecimiento y tipo de servicio. El alto costo también se deriva de la preparación artesanal del producto y del costo de los insumos, pues el kilogramo de la nuez de castilla tiene un precio estimado de 600 pesos. La calidad de los chiles en nogada va en aumento, ya que se han preocupado por ofrecer cada vez más un mejor platillo, que cumpla con las características originales de cuando se creó, en agosto de 1821, cuando las religiosas del convento de Santa Mónica crearon el platillo en honor a don Agustín de Iturbide. Por la tarde, mejor El titular de la dirección de Turismo del ayuntamiento de Puebla, Alejandro Cañedo Priesca, sugirió que el chile en nogada no es para el desayuno, sino para la comida, pero el turista que viene de otros estados o países, tanto escucha del platillo que se le antoja probarlo a cualquier hora. Incluso, el turista extranjero puede pensar que el platillo se sirve todo el año, pero el gastronómico sabe que sólo de julio a septiembre se degusta el original. Este año esperan 335 mil visitantes, con una derrama económica de 320 millones de pesos, considerando con las cifras registradas en el verano del año pasado. Vienen de todo el país, 20 por ciento del Valle de México y el resto de otras entidades.