| Miguel HERNÁNDEZ El Nodo Logístico Intermodal conocido como “La Célula”, que tuvo una inversión superior a los 600 millones de pesos, cumplirá tres años y medio de ser un elefante blanco, el cual hizo el gobierno de Mario Marín Torres y que la presente administración no le ha podido dar una vocación o convencer a las empresas para instalarse. Algunas compañías la visitan para conocer este “puerto seco”, invitadas por la Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico (Secotrade), sin que a la fecha exista alguna interesada en invertir. En enero del 2009 se realizó el corte de listón de las instalaciones, ubicadas en el municipio de Oriental, las cuales tienen un edificio anual, que tampoco utiliza la autoridad federal. A lo largo del 2011, empresas de almacenes, energía solar, entre otras, conocieron el lugar, cuando se dio el cambio de gobierno estatal, pero, hasta el momento, no se sabe de algún interesado por asentarse. En repetidas ocasiones, el titular de la Secotrade, Pablo Rodríguez Regordosa, mencionó que se promueven las instalaciones, aún cuando no están en una buena ubicación. La obra tiene vialidades internas y accesos de la carretera, pero no significa mucho para atraer a los inversionistas, que lo siguen viendo como un lugar alejado para operar. Cadbury Adams, cuando todavía estaba la administración marinista, manifestó su interés, al igual que otras empresas que firmaron cartas compromiso, sin embargo, se cayeron las negociaciones por la crisis de septiembre del 2009 y se frenaron las primeras inversiones. Desde entonces, “La Célula” continúa siendo un proyecto millonario que no logra convencer a las grandes firmas, incluso, ni a Volkswagen se interesó para hacer operaciones en dicho lugar. La obra, que tiene una longitud de 5.5 kilómetros, tampoco cumple con las expectativas de generar empleos, pues se decía que beneficiaría a más de nueve mil habitantes de la zona, situación que tampoco ocurre. |
