Sábado 22 Septiembre 2012
**La artista plástica poblana cumple 13 años de impregnar en colores sus emociones y la técnica heredada de sus maestros, en el Barrio del Artista  Gregorio FUENTES EL BARRIO del Artista, ambiente ideal para pintar, mencionó Luzhart González, pintora, frente a un lienzo, dentro de su local en la famosa callejuela poblana, en el marco del Día Internacional del Artista Plástico. “Yo estoy en el barrio desde hace 13 años. Antes pintaba de forma esporádica, en mi casa, pero vine al Barrio del Artista para profesionalizarme. Esperé hasta que mis hijos terminaran sus estudios para entonces dedicarme de lleno a esto”, recordó emocionada la artista poblana. Mezcla pinturas, de modo delicado y preciso. Se acomodó los lentes y dijo: “Afortunadamente yo no tuve que dejar nada por las artes, ni mi familia, nada, no he perdido nada. Al contrario mi familia, mis hijos, mi esposo siempre me han apoyado”. En aquél pequeño local, de no más de 5 metros cuadrados, una serie de cuadros cubren las paredes: cuadros de vírgenes, paisajes, naturaleza muerta, el mismo Barrio del Artista, entre otros, que le inspiran a seguir creando, la rodean. “He expuesto en varias partes, como en el Museo de San Pedro, o en el del Ayuntamiento, y todas han significado mucho para mí. Además, aquí, en el barrio, cada cuatro años, exponen todos los socios”, expresó. Ella recuerda, pincel en mano, recorriendo la tela, que la pasión por la pintura estaba en ella desde niña, “estaba ahí y había que sacarlo. Esto es vida, es salud, es mi todo”, comenta emocionada. Talento a pulso Ella no proviene de una familia de artistas, solo un tío suyo se dedicó a la pintura. Sus hijos no se interesaron nunca por pintar, si por admirar, pero no la creación, y se aleja un poco, examina su trabajo, cuidadosamente. “A la fuerza no sirve nunca nada, debes amarlo, amar lo que hagas y hacerlo bien. Si lo amas lo vas a hacer bien, hay que poseerlo y dejar que eso nos posea”, recomienda a todos los jóvenes interesados en las artes. Algunos cuadros suyos, han sido vendidos en cinco o seis mil pesos, y es que, entre más caro sea el cuadro, mejores materiales lleva. “Yo uso marcas profesionales, por eso valen más”. “Yo uso un color rojo, que vale tres mil pesos, mi hijo me lo trae de Alemania, si no es él quien lo trae, no es nadie. Ni en México ni en Estados Unidos se consigue ese material”. Agrega que para poder comprar esos materiales se necesita o mucho amor al arte o no llevar sobre sí grandes gastos. Esto no es para enriquecerse, sino para irla llevando y regresa concentrada a su cuadro. “El tiempo para cada cuadro es diferente, tiene que ver la técnica y el tema, me he tardado desde un mes hasta dos meses y medio. Es complicado”. Mira orgullosa su trabajo, y sonríe plenamente. Esto, a veces no es para todos: “Las personas mayores lo ven como un hobby, no les interesa aprender, ni saber dibujar, solo tomar el pincel. Aquí llega gente que sabe, que exterioriza su opinión y cuando quien opina sabe, se siente una gran satisfacción”. La pintora asegura que en Puebla hay muchos conocedores de pintura, entre los jóvenes, estudiantes de artes, lo que supera, incluso, a extranjeros. El Barrio del Artista se le debe a un par de maestros de la antigua Academia de Bellas Artes, hoy Instituto de Artes Visuales, José y Ángel Márquez Figueroa, quienes impulsaron el proyecto. Una vida en el Barrio “Tenemos contrato con el Ayuntamiento por 100 años, vence más o menos en 30 años, ojalá se pueda renovar, esta zona es un gran atractivo turístico para la ciudad”, comentó Luzhart González. Consideró que se debe acercar a los niños y a la sociedad en general a las artes, para cultivarse. El gobierno debe apoyar y acercar el arte a la sociedad, refirió la artista poblana. Su primer maestro fue el famoso escultor, Octavio Ponzanelli. Armando Fuentes Aguirre, escritor y periodista, es un gran cliente suyo. “Cuando viene a alguna conferencia u otro trabajo, siempre pasa a visitarme y me compra alguna obra” “La zona necesita apoyo, hay edificios con cuarteaduras, pero cada compañero atiende su local. Además al gobierno no le interesa. Hasta donde yo sé, se supone que la primera exposición aquí la inauguraron, Frida Kahlo y Diego Rivera”, contó la pintora. Recordó que durante el gobierno de Mario Marín se les prometió apoyo, intercambios con Casa Puebla en Nueva York o Casa Puebla en España, pero no pasó de promesas. “Tengo planeado dejar esto algún día, por enfermedad, pero esto no me va a cansar nunca, esto es mi vida. No me arrepiento de haber empezado a esta edad, mis hijos son ahora personas de bien. Antes me dedicaba al hogar, después surgió esto, me profesionalicé y gracias a Dios se dio”, finalizó Luzhart.