En todo el territorio de Puebla, existen 12 indígenas presos por delitos federales; de este total, siete tiene sentencia condenatoria y cinco continúan en proceso.
Además, siete de los recluidos se encuentran en la cárcel de Huauchinango, 4 en la prisión de Puebla y 1 en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cholula. El total de los presos son del género masculino, según detalla el portal de datos del gobierno federal, con cierre al mes de junio de 2016.
Por el número de indígenas presos, Puebla es la entidad número 13 de todo el país. En primer lugar se encuentra Oaxaca, seguido de Chiapas, Nayarit, Sonora, Guerrero, Ciudad de México, Chihuahua, Yucatán, Estado de México, Hidalgo, Sinaloa, Michoacán y después Puebla.
En los últimos lugares se encuentran Zacatecas, Quintana Roo y Nuevo León, con un encarcelado del orden federal.
Del total de prisioneros, uno pertenece a la etnia mame, que corresponde a la cultura maya y se encuentra recluido en el penal de San Miguel, en Puebla; 8 hablan la lengua náhuatl y están distribuidos en las cárceles de Puebla, Cholula y Huauchinango. También se encuentra preso un indígena Totonaco y un Tzotzil.
Aunque 12 son los indígenas presos por delitos del orden federal, como se exhibe en el portal del gobierno federal, existen unos mil 300 indígenas presos por delitos locales, pero el gobierno estatal no tiene datos disponibles sobre este caso.
De acuerdo al Censo Penitenciario realizado por la delegación de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), en las 22 cárceles de Puebla permanecen reclusos mil 220 indígenas; de los cuales, 95 por ciento son hombres y el resto mujeres.
La delegación de la CDI cuenta con un registro de 36 intérpretes traductores de tres variantes de náhuatl, mazateco, otomí, popoloca y totonaco, acreditados por el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI).
En 2015, la CDI Puebla destinó 1 millón 713 mil 443 pesos para conseguir la liberación de 109 presos indígenas. |