Sábado 12 Noviembre 2016

Hace seis años, en la Sierra norte de Puebla varios cafeticultores tenían un sueño que consistía en hacer una cooperativa para comercializar el café de altura que producían. Eran 76 productores del municipio de Naupan que buscaron diversos apoyos del gobierno, pero no tuvieron suerte y sus planes se quedaron en el olvido.

Fue hasta 2014 que seis personas, hijos de de los productores que buscaron el apoyo antes, retomaron el proyecto y lo hicieron realidad. La motivación que impulsó a esos jóvenes para crear la marca Café Reserva viene de no quedarse sólo a trabajar el campo.

Por medio de un apoyo de 240 mil pesos que les otorgó el gobierno estatal hace dos años fue que inició el proceso para desarrollar la marca que ahora es una realidad. El dinero funcionó para invertir en la torrefacción (tueste) del café y eso les permitió a los productores separarse del círculo creado con los coyotes (intermediarios) que les compraban el kilo a 6 o 8 pesos.

Fotos: Karen Rojas

Francisco Cruz Negrete es uno de los productores que hicieron posible su sueño y ahora está presente en diversas ferias como el Encuentro Nacional de Seguridad Alimentaria que se realiza en el Parque Estatal Flor del Bosque para promocionar y posicionar su producto.

Asegura que el proceso que sigue el café es completamente artesanal y eso hace que el sabor cambie completamente, pues el secado se hace en por medio del sol y no se utiliza ningún tipo de químicos.

En la actualidad, medio kilo de café se vende a 50 pesos y para ellos es un precio justo que difiere mucho de lo que recibían de los coyotes que estaban en su municipio. Con el ingreso extra que reciben, piensan invertir en la marca y ahora buscan darse a conocer en todo Puebla.

"Nosotros estamos en el campo y estamos prácticamente olvidados, por lo que los coyotes nos pagaban lo que querían y eso no nos resultaba a nosotros porque hacíamos todo el trabajo y éramos los que menos ganaban", declaró Cruz Negrete.

Sin embargo, no todo ha sido fácil para los productores de origen nahua, pues con el paso del huracán Earl, la producción sufrió varios percances. Las dificultades en la transportación y distribución del café se volvieron el principal impedimento para poder comercializarlo.

Para su fortuna, la cosecha de los granos del café se hizo unos meses antes de que ocurriera el siniestro y no hubo afectaciones tan graves en la materia prima, pero sí en los procesos de secado y comercialización.

"Se nos complicó la verdad mucho estar trasladándonos y las cosas subieron de precio cuando sucedió lo de las lluvias. El precio de los camiones subió y para conseguir los materiales de empacado fue muy complicado", recordó.

Hoy en día, los productores sueñan con exportar su producto a otros países y posicionarse como una marca de calidad y confianza en todo el estado y la región. El café pergamino que producen se puede conseguir en el municipio de su producción y en la mayoría de las ferias organizadas por Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDROST) de Puebla.