Una oleada de populismo invade la política en niveles no sólo nacionales sino internacionales con el triunfo electoral de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos, el país más poderoso del mundo. Frente a este escenario, lo que parecería hoy pasado es real, con la regresión de valores y con un discurso racista, con el hartazgo de la gente hacia la política y quienes están detrás de ésta. En un diálogo con El Popular, diario imparcial de Puebla sobre la política nacional e internacional, el catedrático investigador de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), Víctor Reynoso Angulo, aborda el debilitamiento de las estructuras partidistas, desde un Partido Acción Nacional (PAN) dividido, hasta un Partido Revolucionario Institucional (PRI) omiso, y afirmó que ningún partido crece, lo que pasa es que el otro está cayendo. Un actor activo en el análisis de la política en Puebla, Víctor Reynoso es también miembro nivel 1 del Sistema Nacional de Investigadores. Aborda el clima social como factor determinante de la dirección que ha tomado la política en el que la gente se observa molesta; acepta que se carece de salidas fáciles y muestra de ello recae, dice, en fracturas como la expuesta en la elección política por género. Hace una fuerte crítica a la legislación del Sistema Nacional Anticorrupción en México, siendo éste el gran pendiente de la política nacional, sin un compromiso partidista que es el motivo que ha arrastrado al país a niveles de simulación y no actuación. Tras las elecciones de Estados Unidos, se observa un panorama complicado para México…- El resultado fue muy sorprendente. Nadie esperaba, primero que fuera candidato (Donald Trump) y mucho menos que ganara; sorprendente porque es una regresión de valores. Si comparamos el triunfo de (Barack) Obama hace 4 y 8 años, un candidato de origen afroamericano que mostraba una postura de la sociedad norteamericana hacia las minorías, (la actual elección) es una regresión a los valores más oscuros que parecía que ya se habían ido, pero estaban escondidos en el clóset. Eso por un lado y es para preocuparse. Hay que distinguir lo que Trump dijo de lo que puede hacer. El muro era una estrategia de mercadotecnia, él lo dijo: 'cuando veo que mi auditorio está aburrido les hablo del muro y se entusiasman', era una estrategia de seducción. Al muro se le puede dar la vuelta, no es una solución. También dice que va a regresar a México 1 millón de mexicanos que trabajan allá, no sé si la economía americana resista la salida de 6 millones o 2 o 1 millón de mexicanos productivos que cumplen con sus responsabilidades. Construir un muro sobre un río es descabellado, pero ese tipo de propuestas hizo que el electorado saliera a votar por él…- Ese es un dato muy importante: hay una ola de populismo de diversos signos políticos y la gente está molesta, pero no tiene salidas racionales y claras a su molestia. La gente está insatisfecha. También habría que ver la línea de fractura de la elección de Trump. Fue muy clara una línea de fractura de género: dicen que si sólo las mujeres hubieran votado hubiera arrasado Hillary Clinton, y si sólo los hombres hubieran votado hubiera arrasado Trump. Los jóvenes votaron por Hillary, como en el caso del Bréxit que fueron los jóvenes quienes votaron por permanecer en la Unión Europea y la gente mayor por salir. También está el caso del presidente de Filipinas, con un discurso populista cercano al racismo (…), parece una oleada común en el mundo, un malestar social que no tiene una salida razonable. El odio es un factor fundamental. El odio divide y el populismo ideológicamente divide, la pluralidad y la complejidad social la divide en dos: son ellos y son los otros; nosotros la raza aria y ellos los judíos, nosotros el pueblo y ellos la oligarquía.
Comportamientos pocos racionales, ¿existe en México ese riesgo?- Sí, busca atajos. Hay una expresión que me gusta mucho de un intelectual que no tiene mucho prestigio, pero la expresión es adecuada, dice Héctor Aguilar Camín: "¿qué tiene la democracia mexicana en su contra? Una, la pasión por los caudillos y los atajos, la idea y la pasión de que va a venir un caudillo que nos va llevar por una ruta corta, por un atajo hacia los fines que queremos". No sé si hay atajos o simplemente hay caminos largos, complejos y difíciles; puede haber líderes, yo sí creo en el liderazgo, pero no ceo en aquel líder caudillezco que nos diga que sabe cómo hacerle, que no nos puede decir cómo, pero que votemos por él y todo se resolverá. La figura del presidente Enrique Peña Nieto ha sido muy criticada, juzgada y observada, pareciera un presidente muy débil- La popularidad del presidente está muy mal. Ha cometido errores porque no ha resuelto problemas, la situación económica se ve muy compleja en parte por el precio del petróleo, en parte por el triunfo de Trump, pero hay responsabilidades internas también. La reacción ante el triunfo de Trump me parece adecuada, no podemos juzgar a partir del todo o nada, no podemos inferir que todo lo ha hecho y lo hará mal, pudo hacer cosas bien y las ha hecho. Yo esperaría, porque le conviene a México, que tenga una política acertada, que escuche a quien deba, que tome las decisiones que deba tomar. ¿La elección en Estados Unidos cambia el escenario en México? Tenemos un periodo electoral que ya está en la marcha con una carrera para ver qué partido mete primero a la cárcel a sus corruptos, hay mensajes en todo esto.- Aunque sea de manera muy simbólica, pero sí. No es claro en qué vaya a influir que Hillary, siendo mujer y esposa de un expresidente, haya perdido, ¿qué tanto puede afectar a Margarita Zavala? Es un caso muy polémico y delicado. Hay gente que hasta se puede ofender, pero a pesar de ser tan distintos y de polos opuestos… Trump y (Andrés Manuel) López Obrador: Trump presume de su riqueza y Obrador presume que no tiene nada. A pesar de esas diferencias ciertas y objetivas hay rasgos del populismo.
Este asunto progresista de despertar las diferencias en un país donde, ahora vemos, no es tan avanzado en ese aspecto ¿Es un espejismo creado por la mercadotecnia?, ¿por las redes sociales?, ¿por discursos huecos?- Es un espejismo, en parte, pero sí hay un sustento real. No es cualquier cosa que un afroamericano haya llegado a presidente de Estados Unidos. Estuvo ocho años y no hubo ninguna reacción violenta contra él, gobernó bien. Creo que sí hay una pluralidad importante en la sociedad norteamericana, una aceptación de los valores de la diversidad, de la equidad de género. ¿Cómo un tipo del nivel de machismo de Trump pudo llegar a tantos votos? Dicen que la única revolución exitosa del mundo es la de la equidad de género, todas las demás fracasaron. La única que transformó a la sociedad es la de equidad de género, parece que en todos estos aspectos hubo una regresión en Estados Unidos. Regresando a la política nacional ¿cómo observa la relación del presidente Enrique Peña y la posición que han manejado con los partidos? Está por un lado el conflicto interno en el PAN y, por otro lado, los priistas- Sabemos que los partidos tienen mala imagen, que en parte se la han ganado. Y no es que la gente esté viendo bien al PAN, sino que la imagen del presidente se expresó en las elecciones. No se ve que puedan levantar concretamente en esto de la corrupción, pues están en un combate muy a medias. La cuestión es que no hay alternativas, una alternativa podrían ser los candidatos independientes, pero no prendieron este año, el año pasado hubo tres triunfos y éste ninguno, y ni siquiera hubo un independiente fuerte, y si no hay alternativa, seguiría siendo lo mismo. La candidatura independiente es muy difícil de lograr y una excepción visible es el caso de Nuevo León, por lo mismo que había una iniciativa que no era realista que no puede cambiar un estado o un país, a lo mejor había un rasgo de populismo. En el caso de Ana Teresa Aranda, no tenía un programa, tenía carisma y energía, pero no tenía un programa claro de para qué quería llegar al poder. ¿Y la pugna interna en el PAN? Tenemos un gobernador con aspiraciones presidenciales, hay un presidente de partido con aspiraciones similares ¿Existe un riesgo de fractura en el PAN?- Sí, desde luego. El riesgo existe, pero yo espero que sean sensatos y lo que menos les conviene es pelearse. La parte de la política que más me gusta es la que dice que política es el arte de administrar las pasiones y los intereses de una sociedad empezando por los propios, el político que no es capaz de administrar sus propias pasiones y sus propios intereses no es buen político y no va a ser un buen gobernador. Si hay tres que quieren y que tienen trayectoria qué bien, que administren su interés, que se pongan de acuerdo para que sea el más adecuado y a los otros que les quede algo, hay una sola candidatura pero la política tiene otras cosas. Tomando en cuenta factores como el narcotráfico, personas golpeadas y linchadas… ¿existe el riesgo de que se tenga primero un candidato y luego un presidente autoritario en México?- Un filósofo decía que es posible todo lo que no es real. Los hechos que mencionas son muy serios, pero creo que más que de un autoritarismo hablan de una falta de gobernabilidad, de una falta de capacidad de los gobiernos para dar seguridad pública de justicia, los linchamientos y todo eso es hartazgo de la gente, porque la policía no hace lo que debe hacer. Sí hay riesgo de autoritarismo, pero en otro sentido; puede que la falta de gobernabilidad dé lugar a un gobernante autoritario, pero también hay una opinión pública más libre, hay competencia entre los partidos, hay pluralidad política. |