Aunado a las bajas calificaciones que la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla (CEDH) otorgó este año a los centros de readaptación social con un 6.1; a nivel nacional, la entidad sumó evaluaciones reprobatorias en cuanto a la salud de los reos en sistemas carcelarios.

De acuerdo con el informe "Protección a salud de personas internas" emitido este año por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en Puebla fallan las condiciones de infraestructura y servicios básicos, así como la atención a internos con discapacidad psicosocial.

En el caso de los servicios, las recomendaciones directas se han hecho en los últimos 25 años a las autoridades que atienden los centros de readaptación ubicados en Puebla, Huauchinango y Atlixco.

El centro de reinserción social de Puebla capital es el que más observaciones ha recibido y que van desde la generación de un servicio médico establecido de forma correcta, alimentos especiales, asesoría, personal psiquiátrico y espacio para enfermos mentales.

Al de Atlixco, por otro lado, se le solicitó un espacio para atender a recién nacidos y a sus madres, trabajadoras sociales, convenios con el sector salud, atención a infecciones de piel, así como atención a enfermos mentales.

Las observaciones hechas al penal de Huauchinango son las menores y se centraron en solicitar atención médica y odontológica a la población de internos.

El informe de la CNDH revela que de las mil 513 señalamientos recibidos en 2015, mil 151, es decir el 76.07 fueron por violaciones a la protección a la salud con las que cuentan los reclusos por lineamientos nacionales e internacionales.

Se agrega que, en 2014, de 130 centros analizados a nivel nacional, 74 no tenían medicamentos, a 67 les faltaba material de curación, 43 estaban sin equipo médico y 30 sin atención, entre otras carencias.

El estudio sobre internos con discapacidad psicosocial se realizó en 2016 y de acuerdo a los estimados de la CNDH, en Puebla hay 164 casos distribuidos en penales estatales y federales.

Este grupo contempla deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales que a largo plazo afectan la forma en cómo se interactúa e impiden la participación plena en la sociedad.

Asimismo se cuenta con el registro de dos internos en la categoría de imputables, un concepto jurídico en el que se reconoce la ausencia de capacidad para conocer el alcance de los propios actos.

Durante 25 años de trabajo de la comisión se han hecho dos observaciones directas al penal de la capital para que las autoridades atiendan a estos grupos de internos.

A nivel nacional, la CNDH identifica la falta de un marco normativo, personal especializado, clasificación, medicamentos, vigilancia, expedientes, infraestructura, condiciones salubres y coordinación con instituciones.