Lunes 11 Septiembre 2017

Abogado, egresado de la escuela Libre de Derecho de Puebla y con una labor política que comenzó en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) desde sus 14 años, Francisco Ramos Montaño ha ocupado cargos que van desde los juveniles priistas hasta ser consejero nacional en dos periodos consecutivos, ha sido diputado federal y local, por lo que dice conocer "desde hace mucho tiempo nuestra ciudad, prácticamente las 30 inspectorías que la conforman, sus casi mil 200 colonias y las 17 juntas auxiliares, pues las he caminado".

Su cuna está en San Baltazar Campeche, una junta auxiliar, ahora metropolitana, que forma parte de la ciudad. Ahí, cuenta, "fui a los 18 años parte de la planilla y en su momento de una junta auxiliar y de una encomienda. De 2005 a 2008 fue director general del Instituto y Casa de la Juventud Poblana donde fundó un modelo de atención reconocido en Latinoamérica y fue también parte de la avanzada que ubicaba el escenario previo a la llegada del entonces gobernador Melquiades Morales Flores, lo que "me dio oportunidad de reforzar a los amigos y amigas"; además, fue asesor del titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de 2013 a 2015, hasta ahora el cargo más elevado que ha tenido.

En la actualidad, a los 37 años de edad y con base en su formación política, aspira a dirigir el comité municipal del PRI en la capital el estado…, aunque también contempla la dirigencia estatal si es que Jorge Estefan Chidiac -el actual líder-, decide dejar el cargo para competir en las elecciones de 2018.

-¿Cuántos años tiene de trayectoria en el PRI?

"Desde los 14 años. Estamos hablando de 23 años, más o menos, de actividad política. No ha habido una sola campaña donde no hayamos participado (…) hemos estado en las etapas que ha vivido el PRI, las conozco perfectamente bien desde el año 1995, en el siglo pasado, cuando el voto no favoreció a Germán Sierra y fue la primera ocasión en que se perdió un Ayuntamiento en la que ahora es la quinta ciudad más importante del país; y en el 2000 que fue otra etapa difícil para el PRI pues perdimos frente a Vicente Fox la presidencia de la república cuando Francisco Labastida se fue al tercer lugar. De ahí vinieron distintos periodos, dos sexenios panistas, uno Fox y otro con Felipe Calderón, donde los referentes del PRI eran Beatriz Paredes y Manlio Fabio Beltrones y sus grupos que tenían la hegemonía para la toma de decisiones, después de este periodo de 12 años, en cierta manera se recupera la confianza ciudadana y se decantó en el gobierno que encabeza Enrique Peña Nieto.

Observo que el PRI vive una etapa difícil y complicada por factores económicos, de seguridad, pero al final se trata de, como actores políticos, hacer las cosas bien. No necesitamos irnos de un partido a otro para seguir haciendo política, creo que quienes hemos crecido en un instituto político no necesitamos ser oportunistas".

-Aspiras a la dirigencia municipal del partido, ¿cómo evaluarías el trabajo de la actual y qué buscas generar en caso de encabezarla?

"La evaluación es más que evidente. Creo que la dirigencia actual y las que hemos tenido en el Comité Directivo Estatal del PRI desde 2010, desde que no somos gobierno, se han derivado de un esquema de acuerdos y negociaciones entre los actores que se observan como aparentes referentes. Los resultados son evidentes: somos en este momento la segunda fuerza política ante los números presentados ante el Instituto Electoral, en la tendencia de encuesta somos la tercera fuerza. Ese es el resultado de la actual dirigencia, en el municipio de Puebla valemos 118 mil votos, eso es lo que vale el PRI en la capital poblana con un padrón votante de más menos 1 millón 200 mil personas, estás hablando de que 10 por ciento del padrón es lo que tienes como simpatía. ¿Qué quiere decir esto? Que necesitamos recomponer distintas cuestiones. Busco generar en el partido una estructura operativa capacitada, bien fortalecida, bien instrumentada, enfocada a aspectos de desarrollo humano y de capacitación tanto en lo electoral como en la promoción del voto. Tenemos a seccionales que son liderazgos; el PRI tiene 767 secciones electorales en la capital y bajo la evaluación que he hecho con mi equipo tenemos 200 de ellos activos.

"Hay distintas estructuras que cuando vienen las campañas se mueven a favor del PRI y se vuelven vulnerables ante la compra de votos o ante el gobierno estatal o municipal, como el equipo del exgobernador Rafael Moreno Valle que tiene muy claro cuáles son las secciones donde deben comprar votos, cuáles las colonias donde tienen que generar determinado apoyo y generalmente se da un resultado bien medido.

"Todos los partidos le apuestan a la fragmentación, incluyendo Morena, porque ese es su voto duro. Ahí lo que busco es ubicar 400 liderazgos operativos en la capital, capacitados en cuestiones electorales, de promoción del voto y cuestiones incluso de movilización. Aquí tenemos a San José Mayorazgo o la Leobardo Coca, colonias con un peso importante y que en su momento le brindaban al PRI una votación elevada, pero han ido perdiendo fuerza. Los gobiernos del PRI tenían un elemento importante que debemos retomar: por lo menos había acciones y programas diseñados con respecto al sentir ciudadano".

-Si no hacen todo ese trabajo de recuperación, ¿quedará en manos de otro partido tanto la presidencia municipal como la gubernatura?

"Está en riesgo todo porque el padrón impactará en la elección nacional. Si perdemos es un efecto cascada o dominó: si descuidas la capital poblana que representa 30 por ciento del listado nominal total del estado va a impactar no sólo en el plano de la gubernatura, vas a impactar en la presidencia de la República y eso es algo que nuestros dirigentes deben pensar. El PRI municipal no es rehén de nadie, ni debe serlo, tiene autonomía como partido, como instituto político. Hay que purgar a quienes le han hecho daño y esa purga requiere de la actividad que nosotros como actores políticos del estado estamos fomentando".

-¿De quién es rehén el PRI?

"Ha sido rehén de los mecanismos anquilosados de quienes incluso ya se fueron del PRI pero fueron parte de esta mecanización de negociación. Siempre habrá en todos los institutos políticos quienes apuesten por utilizar a la dirigencias en un sentido oportunista. Tenemos la obligación de fomentar mecanismos viables o de evitar que se den ese tipo de situaciones, y si se dan no va a quedar otra que evidenciarlas, afortunadamente un servidor tiene en eso total libertad y autonomía. El equipo que represento confía plenamente en un servidor para hablar claramente de todo lo que está sucediendo, sin llegar a ensuciar la vida interna del partido. No quiero afectar a mi partido ni lo haré, tenemos claro quién es el contrincante o los contrincantes; como partidos estamos en un punto intermedio, si hacemos las cosas correctamente creo que tenemos el tiempo suficiente para fortalecer al partido".

-¿Cómo viste al PRI como oposición?

"Hay que observarlo desde el punto de vista político y desde el punto de vista ciudadano, para muchos ese aparente amasiato no existe, quien habla de eso debe puntualizar quienes son, ponerle nombre y apellidos a quienes sí han sido parte o fueron parte con negociaciones con Rafael Moreno Valle. Desde el punto de vista político te puedo decir que ha habido una relación para fomentar determinada ley, para encaminar esfuerzos respecto del combate al crimen organizado en distintas situaciones.

 

En el equilibrio de fuerzas natural en el estado de Puebla, la clase política poblana priista se ha ido desgastando desde 2010 a la fecha a sí misma. Yo no he observado una construcción de unidad real, porque quienes hoy representan el liderazgo del PRI se representan a sí mismos y son atrevidos al salir y decir que buscan determinada posición, no sólo hablo de los priistas, hablo de todos actores de los demás partidos. Hoy observamos que con total irresponsabilidad actores como Rodrigo Abdala salen y dicen que tienen condiciones para ser gobernador o candidato a presidente municipal. Para atreverse a plantear esa situación necesitamos prepararnos primero el PRI y el PAN y el PRD y Morena; por eso los ciudadanos se ofenden al observar a los políticos: requieren de personas congruentes, que sean honestas, pero que también tengan la preparación necesaria para ser funcionarios".

-La congruencia ya es algo extraño en los partidos ¿Hay priistas congruentes?

"En todos los partidos existen perfiles que buscan hacer las cosas bien. La congruencia está basada en la representación que uno tiene; poco a poco necesitamos ir recuperando en el plano ciudadano esta credibilidad no sólo con lo que representa la vida interna del PRI sino con lo que representa la elección de 2018".

-¿A quién ves con posibilidades de ganar la presidencia municipal?

"Necesitamos postular a quien le haga más sentido al ciudadano, independientemente de la propuesta y la estructura. En este momento observo más de seis. En el PAN se habla de Jorge Aguilar Chedraui y de Mario Riestra, a quienes no veo tan peligrosos como el perfil de la mujer que postule Morena. En el PRI habrá que esperar unos días porque el Instituto Electoral ha adelantado los tiempos".

-¿Es cierto que Enrique Doger va como puntero a la gubernatura?

"En las encuestas de conocimiento, los perfiles que observo de posicionamiento claro, netamente de conocimiento, aparecen Juan Carlos Lastiri y Enrique Doger, cualquiera de ellos dos será competitivo. En el Comité Municipal estamos listos para debatir, para entrar en un análisis de los mejores perfiles".

-¿Qué es lo que realmente está pasando en el PRI? Vemos un exgobernador que fue priista, tenemos a gente que se está yendo a Morena…

"No es solamente el PRI. En todos los partidos observo una pelea encarnizada por ocupar las posiciones (…) no porque seas candidato o coordinador de los esfuerzos de determinado partido de inmediato te vas a volver diputado o gobernante, ese es el gran error".

-¿Qué diferencia al PRI de otros partidos, cuál sería la oferta?

"La oferta es la que debemos impulsar y construir. La obligación que tenemos es recomponer no sólo en el estatuto, por ejemplo, que se abran espacios para mujeres o jóvenes. Hoy en el PRI uno de cada tres candidatos tiene que ser joven y eso no nos garantiza que vamos a tener el triunfo. Tenemos que cuidar cuál es ese joven que vamos a postular en determinado municipios y distritos; la garantía estriba en la viabilidad de los candidatos, en la construcción de la propia propuesta, y en una estructura realmente competitiva. En este momento en la capital poblana no contamos con una estructura competitiva, tenemos que fortalecerla e impulsarla".

-¿Les dará el tiempo?

"Sí, incluso para hacer el llamado a quienes estuvieron apoyando a Rafael Moreno Valle desde 2010, tenemos que reconciliar, construir, fortalecer.

-¿Existe riesgo de que haya dedazo en la selección del presidente municipal del PRI?

"Es la vía que le llaman del consenso o el acuerdo y bajo ese escenario estoy preparado también".

-En otras palabras, ¿que haya imposición?

"Es probable que contemplen esa vía y no estamos en condiciones que se adopte. Sí se requiere agotar el consenso desde el Comité Ejecutivo Nacional y con los actores a nivel nacional estamos haciendo lo propio y lo seguiremos haciendo. Lo que te puedo compartir es que yo seguiré haciendo una labor en la capital poblana. Apelo a la sensatez y a la congruencia de la dirigencia estatal y nacional para que no nos equivoquemos".

-Me da la impresión de que hay un grupo de priistas que está inconforme con la forma en cómo se han hecho las cosas

"El equipo que represento tiene una influencia importante en la capital poblana y necesitamos de todos los equipos, pero más allá de números y cifras hay que buscar ser congruentes en la toma de decisiones".