Puebla, quinto lugar en cáncer infantil

Puebla ocupa el quinto lugar a nivel nacional en cáncer infantil, de los que el más común resulta la leucemia. La tendencia está en Tehuacán, donde en los últimos 18 años, este municipio ha registrado el 20 por ciento de los casos de cáncer en el estado.

Francisco Álvarez, director operativo de la Fundación Nueva Esperanza, declaró que sólo en la organización que preside, hay 190 niños en tratamiento, de los cuales la tasa de mortalidad es de 50 por ciento, que está dentro de la media nacional.

En Puebla, Oaxaca y Chiapas, la mayoría de los niños llegan a revisión médica cuando están en la etapa final del cáncer, por lo que es necesario dar atención inmediata a cualquier indicio de enfermedad y se necesita mayor difusión para la prevención de esta enfermedad.

Roxana Pelayo, investigadora del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), asegura que el número de cáncer no ha mermado y en cambio, se espera que haya un aumento de infantes con cáncer en los próximos 30 años, sobre todo en los países en desarrollo.

A principios del año pasado, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación a los gobiernos de Puebla y Tlaxcala para advertir a los ciudadanos que el río Atoyac porta agentes cancerígenos, tales como tolueno, benceno y xileno.

Para lo que la doctora Pelayo explicó que la exposición prolongada a los químicos de este cause pueden atribuir al desarrollo del cáncer, sin embargo no es posible calificar a estos químicos cómo el único detonante de la enfermedad.

Aún así resulta preocupante que se utilicen las aguas del río para el uso humano ya que el 66 por ciento de los casos de cáncer resultan de una situación multifactorial y el 23 por ciento sucede por razones ambientales.

La investigadora explicó que el sector con mayor riesgo de contraer esta enfermedad son los niños con Síndrome de Down, puesto que los fallos genéticos son dominantes en comparación con el resto de la población, de manera que el peligro se extiende a 60 casos por millón en México, esto significa que los niños Down tienen 10 veces más probabilidad de contraer la enfermedad.