Registran mil 485 casos de muerte fetal en Puebla

Puebla fue la cuarta entidad con más casos de mortalidad fetal en el país durante 2017; de los datos del estado destacaron las cifras de la capital, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El 28 de septiembre el Inegi dio a conocer la última actualización sobre este tema con corte a 2017, en donde se refiere que el Estado de México ocupa el primer lugar a nivel nacional con 4 mil 984, le sigue la Ciudad de México con 2 mil 265 y en tercer lugar se localiza Guanajuato con mil 618.

El instituto define mortalidad fetal como "la muerte de un producto de la concepción, antes de su expulsión o extracción completa del cuerpo de la madre, independientemente de la duración del embarazo; la muerte está indicada por el hecho de que, después de esa separación, el feto no respira ni manifiesta ningún otro signo de vida, tal como latidos del corazón, pulsaciones del cordón umbilical o movimientos efectivos de los músculos de contracción voluntaria".

A lo largo del 2017 registraron mil 485 decesos fetales en Puebla, cifra que representa un crecimiento respecto al 2016, cuando hubo mil 460; sin embargo, no es la cantidad más alta desde 1985, pues en 1990 hubo 2 mil 447 casos.

El Inegi realiza una clasificación respecto a las características de la madre, entre ellas se encuentra su lugar actual de residencia. Respecto a la entidad, destaca la ciudad de Puebla, de donde son originarias 335 mujeres quienes enfrentaron esta situación. En segundo lugar se localiza Tehuacán con 85 y en tercero Atlixco con 45.

De los fallecimientos fetales en el territorio poblano, el Inegi informa que 758 fueron por parto vaginal espontáneo, 362 por cesárea, en 25 no se especificó, 1 por fórceps y 13 "por otra" circunstancia.

El Inegi también indica que de las muertes en Puebla, la mayoría ocurrió cuando el feto tenía 24 semanas de gestación al conjuntar 100; en 75 casos tenían 39 semanas y en 74 tenían 40 semanas.

Respecto al nivel de escolaridad de las mujeres que perdieron a su hijo en la entidad, la mayoría contaba con la secundaria o su equivalente, esto al sumar 367, le siguen las de bachillerato con 295 y, en tercer lugar, las de primaria completa con 258, sólo 52 no tenían escolaridad.

De las muertes fetales en el territorio poblano, mil 127 de las mujeres no trabajaban y 304 sí lo hacían; en tanto a este último grupo, 80 eran profesionistas o técnicas, 32 eran auxiliares en actividades administrativas y 31 laboraban como comerciantes, empleadas en ventas y agentes de ventas.

En cuanto a su edad, 378 tenía entre 20 y 24 años; 340 tenían entre 25 a 29 años y 244 eran del grupo de 15 a 19 años, por el contrario sólo cinco tenían de 45 a 49 años de edad, según las estadísticas.

El instituto también consideró si las mujeres hablaban alguna lengua indígena, sólo 167 contaban con esta característica, por el contrario, mil 258 no tenían esta habilidad.