Incidencia delictiva no cesa en Puebla 

El clima de horror encontró sus casos más representativos en los que las víctimas fueron más jóvenes

Durante los primeros días de octubre, una serie de hechos delictivos registrados en diferentes regiones del estado pusieron de nueva cuenta la mirada en la Puebla violenta e insegura.

Casos como el secuestro y asesinato de Andrés Larrañaga, universitario de origen oaxaqueño; el homicidio de un aprendiz de ingeniero en Tehuacán o la masacre de una familia en la Sierra Norte, fueron noticia a nivel nacional.

La situación llegó incluso al Congreso local, donde el presidente de la Mesa Directiva, José Juan Espinosa Torres, pidió la destitución de los altos mandos policiacos y el diputado de Morena, Fernando Sánchez Sacia, la comparecencia del titular de la Fiscalía General del Estado (FGE).

El clima de horror encontró sus casos más representativos en los que las víctimas fueron más jóvenes: el pasado lunes 8 de octubre un comerciante de apenas 23 años fue asesinado frente a su carrito de comida a unos cuantos metros de la Prepa Ibero, en la zona limítrofe de San Andrés Cholula.

Estefano Alvarado fue privado de la vida por un comando armado a las 13 horas de ese lunes, en medio del ingreso y salida de estudiantes de la preparatoria de la Ibero.

Apenas tres días antes, la noticia de la localización del cuerpo de Andrés Larrañaga, quien cursaba Ingeniería Mecánica en la Universidad de Ciencias del Desarrollo (UDES) fue dada a conocer por la Fiscalía.

Larrañaga, de apenas 20 años, fue visto por última vez la noche del viernes 1 de octubre al salir de su centro de estudios, ubicado en la Colonia Volcanes de la ciudad de Puebla. De acuerdo con información de las propias autoridades, tres compañeros del joven lo privaron de la libertad y posteriormente lo asesinaron.

Ese mismo día fue sepultado Aldo Felipe García Jiménez, estudiante de Ingeniería en el Instituto Tecnológico de Tehuacán (ITT) quien fue asesinado durante un asalto violento en dicha demarcación de la Sierra Negra.

El legislador local Fernando Sánchez Sacia presentó un punto de acuerdo en el Congreso para llamar a comparecer al titular de la Fiscalía, Gilberto Higuera Beltrán. El punto de acuerdo fue apoyado por todas las bancadas políticas.

El colofón de la violencia en Puebla tuvo lugar la noche del jueves 11 de octubre, cuando tres miembros de una misma familia fueron acribillados con al menos 60 impactos de bala al interior de un vehículo en Zacatlán.

La FGE confirmó que entre las víctimas hay un menor de cuatro años y que el triple homicidio se cometió a sólo unas calles del Centro de ese Pueblo Mágico. Versiones no oficiales apuntan a que el caso se trata de un ajuste de cuentas.

  • URL copiada al portapapeles