Humberto Aguilar: La dirigente no me ha llamado para invitarme a una reunión

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En esta segunda entrega de la entrevista con Humberto Aguilar Coronado, consejero vitalicio del PAN, el político aborda los mejores perfiles que tiene el partido para elegir al candidato a gobernador en el proceso electoral extraordinario, desde militantes de antaño hasta fieles morenovallistas, pero también exintegrantes como Ana Teresa Aranda.

Rechaza que con Rafael Moreno Valle Rosas el partido haya alcanzado espacios que antes no tuvo, y recuerda alcaldías con gran peso obtenidas, reiteradas veces antes de la llegada del exgobernador. Con ello, reafirma que para recuperarse, el PAN requiere una dirigente "de altura" que vea primero por los intereses de la militancia, antes de un grupo.

¿Quién es la figura candidateable en el PAN; la que traerá al partido de nuevo al escenario político? ¿Usted?

-El Partido de Acción Nacional va a tener que decidir sobre quién es el más competitivo en este momento, ver dos cosas: exigirle que trabaje por la unidad y pedirle también que busque otras alianzas. No veo otros perfiles que no sean los que se han mencionado en las encuestas y punteros reales, un Mario Riestra, un Eduardo Rivera o un Jorge Aguilar Chedraui. Y a mí, en lo personal, me parece que el Partido Acción Nacional haría bien si buscará a Ana Tere Aranda como su candidata para la gubernatura del estado; ella no milita en el partido, los otros tres que he mencionado sí militan, son perfiles que pueden ayudar a sumar voluntades al interior del PAN. Primero, buscar la identidad del PAN, luego, salir a buscar la alianza con la sociedad.

¿Sabe si hay ya un acercamiento con Ana Teresa Aranda?

-No, no lo sé. Esto es una idea que a mí se me ocurre; podría mencionar a varios perfiles más: Guillermo Velázquez, que es el alcalde de Atlixco, es el único que ganó una ciudad importante. Sólo ese hecho lo hace ser o estar en la pasarela de los candidateables. ¿Cuál es el reto? Que quien dirija el partido en Puebla esté a la altura, que sea una mujer de Estado, que vele primero por los intereses del PAN y no de su grupo.

¿Qué rescataría de la corriente morenovallista que se formó en el PAN?

-Sin duda alguna hay varios perfiles, que evidentemente son rescatables, llámese: Juan Pablo Piña y muchos más; hay mucha gente. El problema es que no los dejaron crecer y no se podían mover so pena de que les dieran un manotazo en la mesa. Esa forma de actuar en el PAN se tiene que acabar. Tenemos que volver a las decisiones democráticas que tomen sus militantes. Dicen que "sólo se ganó con Moreno Valle", es falso; antes de Moreno Valle ya habíamos ganado las principales ciudades del estado, ya habíamos ganado Puebla, Tehuacán, San Martín, Atlixco, varias veces; San Andrés, San Pedro Cholula, Huejotzingo, y ya habíamos ganado diputaciones federales. Sí, por supuesto que vino a imprimir una dinámica distinta. Yo lo digo: quien quiera venir al PAN, es bienvenido, pero que adopte las reglas, los principios y valores del PAN. Si quieren venir y traerse las prácticas, los malos manejos, las malas mañas de otros partidos políticos, aquí no caben.

¿Hay heridas que sanar con los panistas inconformes al morenovallismo, se podrán sumar al llamado de unidad?

-Todo mundo está en la disponibilidad de hacerlo, así se manifestó esa reunión de enero con Marko Cortés, estuvieron 20 liderazgos del partido. Por la mañana tuve una reunión con un grupo de panistas y todos están con la disponibilidad de aportar para el futuro cercano y para el futuro posterior de la elección del Partido de Acción Nacional. El panista sabe que debemos trabajar para seguir.

Los partidos que fueron aliados del PAN en procesos electorales anteriores hoy muestran la espalda…

-Eso es lo que ha confundido al electorado. Tal parece que hoy están volteando a ver a Morena, estos grupos pequeños o partidos emergentes, como se les llama. Y entonces la gente se pregunta: ¿bueno, qué no apoyarán al PAN?, ¿entonces, dónde queda mi voto?, si yo quería votar por el PAN, no por el PRD, PSI, Panal o Compromiso por Puebla, y ahora ¿dónde está?

Eso es lo que me parece es el reclamo más grande del panismo. Sostengo desde hace seis años, y lo tengo por escrito, que empezamos a perder cuando hubo gente que utilizando el nombre del PAN le quitó el monopolio de la corrupción al PRI y entonces el PAN comenzó a caer en los resultados electorales, porque empezó a perder la confianza. Hay que recuperar esa confianza y sólo se recupera con la identidad.

¿Qué opina del PRIMOR?

-Me parece que se explica por sí sola la broma de Yeidckol Polevnsky. Fue la primera que atacó al PAN diciendo que éramos el PRIAN, porque aportábamos votos por aprobación de leyes que beneficiaban a México; pero decir que se escucha mejor PRIMOR es una aceptación tácita de lo que el PAN denunció toda la campaña, de este acuerdo que tenían de impunidad, entre el candidato de Morena y el expresidente Enrique Peña Nieto. Así se está viendo.

¿Cómo ve la competencia de panistas frente a Luis Miguel Barbosa, Alejandro Armenta y Nancy de la Sierra?

-Cualquiera de ellos tendrá que competir y meterle todo el acelerador para presentar una opción a los poblanos. Yo, tanto a Nancy como a Alejandro y a Luis Miguel, sólo los conozco bien, los respeto mucho y cada quién tiene que hacer su esfuerzo. Ellos que digan quién es su candidato o candidata y el PAN que decida quién es su candidato; que nunca más nadie, fuera del PAN, decida quién será el candidato.