Luz Nayelly estudiaba en el bachillerato José Vasconcelos y era acosada por César, un joven de 17 años, quien no aceptó que ella no quisiera ser su novia; bajo engaños le quitó la vida y abandonó su cuerpo en una cueva ubicada en la localidad de Huitzmalo, en Ajalpan. La historia de Nayelly es la última de cuatro feminicidios registrados en mayo. La cifra de estos asesinatos sigue en aumento, pese a que la Secretaría de Gobernación del estado de Puebla declaró una alerta de género en 50 municipios de la entidad.

De acuerdo con el mapa de feminicidios creado por el Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos (Odesyr) AC, las mujeres que han sido asesinadas tenían menos de 25 años y los victimarios eran sus parejas o exparejas.

La primera muerte de mayo fue en el municipio de Zihuateutla, en la Sierra Norte. Se trató de Norma Edith, tenía 22 años y hasta el momento no hay detenidos por su asesinato; sus amigos y familiares creen que el culpable fue su esposo, a quien quería abandonar. Los vecinos escucharon una discusión y posteriormente detonaciones de arma de fuego, cuando encontraron el cuerpo de Norma Edith; a su lado estaba su esposo y en su ropa tenía manchas de sangre.

Las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) y la comandancia de Xicotepec realizaron las diligencias del levantamiento del cadáver e iniciaron las investigaciones de ley. Pedro fue llevado en calidad de detenido al Hospital Integral de Xicotepec, porque luego de presuntamente matar a su esposa intentó suicidarse.

El segundo feminicidio fue el de María de Jesús, quien acababa de cumplir 16 años; antes de encontrar su cuerpo fue reportada como desaparecida en el municipio de Tlacotepec de Benito Juárez. De acuerdo con sus familiares, el 9 de mayo perdieron comunicación y de inmediato su fotografía fue difundida en redes sociales. Aunque fue trasladada al Servicio Médico Forense, se desconoce cuál fue la causa de su muerte, así como los detalles del hallazgo. Personal de la Fiscalía realizó las diligencias correspondientes para poder dar inicio a las investigaciones.

Ingrid Aremis fue el tercer caso. Estudiaba en la Facultad de Psicología de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y fue hallada sin vida en su domicilio en el municipio de San Andrés Cholula. La autopsia reveló que había muerto por estrangulamiento y el principal sospechoso era un pretendiente, a quien presuntamente rechazó. Ingrid fue encontrada sobre el sillón de la sala por su compañera con la que compartía departamento y la casa fue resguardada por policías municipales; más tarde personal de la FGE encabezó las diligencias del levantamiento de cadáver.

El cuarto feminicidio que se registró hasta el 23 de mayo en la entidad poblana fue el de Luz Nayelly, el 16 de mayo, cuando no regresó a su casa; sus familiares comenzaron a buscarla y durante la madrugada del día siguiente se encontró su cuerpo en una cueva de la Sierra Negra; presentaba huellas de abuso sexual y lesiones en el cuello.

Con Luz Nayelly suman 38 feminicidios en lo que va del año, de acuerdo con el Odesyr; no obstante, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacionalde Seguridad Pública (SESNSP) sólo reconoce 18.