Un año sin visos de justicia en Acatlán

De los 29 acusados por el linchamiento de Acatlán, 25 siguen prófugos de la justicia

A un año del linchamiento en Acatlán de Osorio en contra de Alberto Flores Morales y Ricardo Flores Rodríguez –tío y sobrino, respectivamente–, que se transmitió a través de Facebook Live, familiares de las víctimas ven lejos la justicia.

Sara Sabina Flores e Irma Garzón Flores, lamentaron que de 29 personas señaladas como presuntas responsables del homicidio, por su participación directa e indirecta, 25 están prófugas.

Explicaron que existen las órdenes de aprehensión que liberó un juzgado de control desde el año pasado, días después de los hechos, pero no se ejecutaron.

Sara Sabina, prima de Alberto y tía de Ricardo, dijo que la mayoría de las personas a las que se ordenó su detención abandonaron su comunidad, San Vicente Boquerón, para evitar la cárcel.

Dijo que cree que hay otros que prefirieron quedarse ahí, pero permanecen escondidos con la ayuda de familiares.

“Pues qué más quisiéramos que haya justicia, pero todavía no la hay, todavía hay mucha gente que participó en eso (linchamiento) pero no ha sido detenida; unos se fueron y otros siguen ahí en el pueblo, pero bien escondidos porque no quieren que los atrapen,” comentó.

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Según la familia, cuatro personas fueron detenidas por esos hechos de agosto de 2018, pero uno de ellos, identificado como Manuel N, murió en el Hospital General de Izúcar de Matamoros a causa de una cirrosis hepática.
El año pasado, Alberto y Ricardo estaban en la comunidad de San Vicente Boqueron. Bebían cerveza cuando fueron señalados como presuntos robachicos.
Una multitud comenzó a golpearlos, pero la Policía Municipal los rescató y trasladó al penal en Acatlán de Osorio, hasta donde se trasladaron los pobladores para sacarlos de una celda y perpetrar el asesinato.
La Fiscalía General del Estado (FGE) sostuvo que tío y sobrino no eran secuestradores y que todo se generó por un rumor sin sustento.
Irma Garzón, también familiar de las víctimas, dijo que este caso no debe pasar desapercibido para que no se repita un linchamiento a partir de una mentira.
Este día, en Tianguistengo, se llevará a cabo una misa por el descanso de las dos personas, y más tarde los familiares acudirán al panteón para el levantamiento de cruz, práctica católica en las comunidades mexicanas.