Invitan a estudiantes a formar parte del programa Dale la Cara al Atoyac
Julieta Saavedra participó en la conferencia "Agenda 2030 desde diferentes sectores”, organizada por estudiantes
Julieta Saavedra invitó a estudiantes para que se involucren en la labor de concienciar, colaborar y vigilar que se cumpla con la legalidad para poder así combatir la contaminación del río Atoyac que cruza la ciudad de Puebla, y está considerado el segundo afluente más insalubre del país. Ella pertenece a la organización Dale la cara al Atoyac, y participó en la conferencia "Agenda 2030 desde diferentes sectores”, organizada por estudiantes de Relaciones Internacionales del Instituto Tecnológico de Monterrey, y donde participaron ponentes del sector gubernamental, privado y social. Dale la cara al Atoyac es una de las muchas asociaciones sociales, civiles, universidades y gobiernos a nivel internacional que han asumido los compromisos que marca la agenda 2030, un acuerdo entre países que conforman la Organización de las Naciones Unidas ONU, para impulsar 17 objetivos de desarrollo sostenible y la cual es un punto de referencia internacional para la aplicación de proyectos socialmente responsables. Por parte del gobierno federal, Rubén Guzmán, de la Agencia Mexicana de Colaboración, expuso los trabajos que lleva a cabo el programa de colaboración sur-sur, en una estrecha colaboración entre México y Chile, donde se colabora en proyectos productivos entre ambos países latinoamericanos. También puedes leer: Presentan siete acciones para salvar al Río Atoyac
La cooperación sur-sur es horizontal, y una oportunidad de los países entre economías similares, en vías de desarrollo, que colaboran para enfrentar y abonar a un gran resultado. Esta agenda 2030, se plantea trabajos para terminar con la pobreza, hambre cero, salud y bienestar, educación de calidad, igualdad de género, agua limpia y saneamiento, energía asequible y no contaminante, trabajo decente y crecimiento económico, industria Innovación e infraestructura, reducción de las desigualdades, ciudades y comunidades sostenibles. También producción y consumo responsable, acción por el clima, vida submarina, vida de ecosistemas terrestres, paz, justicia e instituciones sólidas y alianzas para lograr los objetivos.
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