En riesgo por coronavirus, la mitad de MIPyMES: franquicias

El representante de los empresarios dijo que el escenario es complicado, pues deben seguir pagando rentas y salarios.

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En un escenario de cese total de las actividades económicas no indispensables, aseguró la Red Mexicana de Franquicias, la mitad de las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) en el estado estarían en riesgo de cerrar sus operaciones definitivamente, más allá del periodo obligatorio correspondiente a la emergencia nacional derivada del Covid-19.

“Si hablamos de cinco millones de MiPyMEs en México, más de dos millones no sobrevivirían (...), cinco y medio millones de empleos que perderíamos,” explicó su presidente, Francisco Lobato Galindo.

Habiendo resistido un 2019 atípico, de prácticamente nulo crecimiento económico, las empresas estarían sostenidas “con alfileres”, por lo que una eventual emergencia nacional, similar a la de algunos países europeos y estados de la Unión Americana, que han empezado a detener el libre tránsito y todas las actividades económicas no esenciales, éstas corren el riesgo de no superar la contingencia sanitaria.

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“En ese escenario las ventas se detienen, pero los gastos no. Los empresarios tenemos que seguir pagando renta, luz, teléfono, impuestos, pero sobre todo la nómina,” agregó.

Si la curva de transmisión comunitaria activa orilla al gobierno Federal a tomar medidas más agresivas para contener la epidemia de coronavirus, apuntó Lobato Galindo, se abren espacios jurídicos para los trabajadores y las empresas.

Hasta por un mes, cobertura de salarios

Desde dejar de pagar rentas o declarar moratoria con proveedores sin entrar en concurso de acreedores o quiebra, sería parte de la suspensión de obligaciones legales de las empresas, pero también el pago de salarios mínimos a los trabajadores, de acuerdo con la Ley Federal del Trabajo.

El patrón, indica la fracción VII del artículo 429, estará obligado, en el caso de la suspensión de labores por motivo de una contingencia sanitaria como la presente, a pagar a sus trabajadores una indemnización equivalente a un día de salario mínimo general vigente por cada día de la suspensión, sin que ésta exceda un mes.

Más de 70 mil trabajadores del sector que representa la Red Mexicana de Franquicias estarían, pese a estos amortiguadores económicos, en riesgo de perder sus empleos por el cierre o el recorte de “gastos” en sus respectivas fuentes de trabajo.

Lobato detalló que son las franquicias hoteleras, restauranteras y educativas las que más preocupan: “Esos tres que venden servicios, la van a pasar difícil. Queremos ser optimistas, pero el escenario es complicado. Por eso es importante que no toquemos fondo, que nos guardemos; preferible parar dos semanas que seis meses.”