Acusan a trabajadoras sociales de La Margarita de colusión con funeraria

Ofrecen a los familiares de los pacientes los servicios de una funeraria específica, aunque el IMSS no tiene ningún convenio con las empresas de este ramo.

Al menos dos trabajadoras sociales del IMSS La Margarita, refiere personal de funerarias locales, estarían coludidas con una empresa del ramo para ofrecer de manera exclusiva sus servicios a los familiares de pacientes fallecidos por infecciones respiratorias, entre éstas las derivadas de COVID-19.

 “En el área del piso dos, que son los aislados de COVID-19, tienen muchos decesos y las trabajadoras sociales están coludidas con una funeraria que se llama Amor Eterno. No les importa la salud de las personas, los dejan ahí en el piso y no los dejan salir a buscar su funeraria con el propósito de que ellos canalicen el servicio y tengan una comisión las trabajadoras sociales”, relatan.

En los pasados días, familiares de Silvia N, fallecida el 1 de abril tras contagiarse del nuevo coronavirus, denunciaron públicamente la presión de una de las trabajadoras sociales para contratar los servicios de la funeraria.

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El 27 de febrero, mucho antes de que se confirmara el primer caso de COVID-19 en la entidad, esta práctica ya había sido identificada por los trabajadores de otros servicios funerarios.

— No es un servicio (del hospital), pero ellos le trabajan al IMSS. ¿Sí me explico?

— ¿Como una especie de convenio?

— Ándale, ajá (...) Es como el Audi, pero tiene sus propias agencias de ventas.

En un video compartido con El Popular, la trabajadora social explica al familiar, que ya contrató el servicio de otra funeraria, las ventajas que tendría de escoger a la que tiene “convenio” con el Seguro Social.

 “Con estos yo puedo hablar, que vengan rápido, te lo entrego (el cuerpo) y todo. Con los otros no, porque no sé cómo estén sus servicios”, comenta la trabajadora social mientras le enseña al familiar las capillas de la funeraria. “Todo lo que tú necesites, yo con ellos me puedo comprometer”, agrega.

Los trabajadores funerarios entrevistados aseguran que no se trata de un problema meramente económico —por la dificultad que esta presunta colusión impone sobre su labor—, sino del riesgo de contagio al que exponen a los familiares de los fallecidos.

 “Esto ya pasaba antes del brote de coronavirus, pero ahora está muchísimo más cabrón y nosotros, los que realmente nos arriesgamos para llevar el pan a la casa —manipulando los cuerpos—, nos vemos afectados”, comentan.

De acuerdo con la propia delegación del IMSS en Puebla, hasta el momento no se tienen quejas ni reportes en contra del área de trabajo social del hospital.

Anomalías, también en las causas de muerte

A esta anomalía propia del sistema burocrático del sector salud se suma otra, que tiene que ver con las causas de fallecimiento registradas en las actas de defunción.

 “En lugar de venir el diagnóstico certero lo están disfrazando por neumonía: atípica, viral por focos múltiples, por choque séptico... esto es lo que está sucediendo no sólo aquí, si no en todos los hospitales de Puebla”, aseguran.

Aun cuando los diagnósticos fuesen correctos, argumentan, el número de casos con estas características fuera del periodo de influenza estaciona ya se sale de sus registros históricos.

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