Cierre del centro, peor que COVID-19 para comerciantes: Ayala

José Juan Ayala, presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, dijo que no fueron tomados en cuenta para el cierre del centro.

La restricción del tránsito vehicular en el primer cuadro de la ciudad fue una medida unilateral, sin argumentos y apoyos para comerciantes que provocará el cierre definitivo de al menos 300 negocios a partir del 1 de mayo y posteriormente 100 por semana hasta las 6 mil unidades de negocio que aún están abiertas

Así, lo denunció José Juan Ayala Vázquez, presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico de Puebla, quien aseguro que en ningún momento fueron tomados en cuenta.

Destacó que hasta el momento continúan abiertos aproximadamente 6 mil comercios que pretenden salir adelante y proteger económicamente al personal; sin embargo, las medidas que se están aplicando en el corazón de la ciudad sólo provocará que los negocios bajen sus cortinas definitivamente, situación que calificó es más grave que el propio COVID-19.

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“Nosotros calculamos que todavía funcionan 6 mil comercios abiertos lo que están buscando no es exponer su salud, sino tener un poco de ingreso para pagar lo indispensable que es nuestro personal. Gran parte de los negocios tienen peligro de desaparecer a partir del 1 de mayo", mencionó.

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El empresario precisó que seguirán intentando dialogar con las autoridades para obtener apoyo, ya que en este momento el sector empresarial atraviesa por una gran incertidumbre porque existen otras zonas con mayor afluencia vehicular y peatonal como la 16 oriente- poniente.

“Al día de hoy lo único que tenemos es una gran incertidumbre y el problema de la pandemia puede ser superado en mucho más por el problema social", dijo.

Señaló que los establecimientos que continúan abiertos están siguiendo todas las medidas sanitarias que emitieron los tres órdenes de gobierno, entre ellas, no permitir acceso a más de tres personas por negocio, mantener sanitizada la mercancía y el local, así como otorgar gel antibacterial, guantes y cubrebocas a los trabajadores y clientes.

"La gente, cuando tenga que ir a tomar su transporte o buscar su vehículo mucho más lejos va a ser mucho más difícil y peligroso caminarlo, no lo entendemos. Pudimos manejar los horarios, pero las autoridades parecen que no nos escuchan y sólo nos perjudican”, comentó.

Ayala Vázquez reiteró que necesitan una reunión urgente con las autoridades para determinar estrategias que no provoquen un caos entre los pequeños negocios, pues evitar que el mismo transporte público o privado entre al Centro Histórico provocará el aumento de inseguridad, pues es muy peligroso caminarlo.

 

 

 


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