Control del agua causa conflictos y corrupción en juntas auxiliares

Habitantes de Santa María Xonacatepec acusan al edil de hacer negocio con la venta de pipas.

Control del agua causa conflictos y corrupción en juntas auxiliares
Agencias | Advirtieron que de no haber solución cerrarán la autopista Puebla-México. Control del agua causa conflictos y corrupción en juntas auxiliares

Durante la contingencia sanitaria por el coronavirus, el suministro del agua potable se ha convertido en un problema para los habitantes de las juntas auxiliares de Santa María Xonacatepec, San Miguel Canoa y San Sebastián de Aparicio.

Javier Merino, edil de Santa María Xonacatepec, dejó sin agua a los ciudadanos mediante cortes al suministro del pozo y hace negocio al vender pipas de agua en 400 pesos, denunciaron los habitantes.

La falta de agua pone en riesgo a por lo menos 15 mil lugareños de contagiarse de Covid-19 a, al no contar con el líquido para el constante aseo personal y general.

Gabriel Sánchez Ortiz, en representación de los afectados, mencionó que para el funcionamiento del pozo los vecinos pagan 80 pesos al mes; sin embargo, hasta la fecha las autoridades no han resuelto la carencia de agua, pues argumentan que no hay dinero para arreglar las válvulas.

“Los administradores del pozo y el edil cobran hasta 400 pesos por la entrega de pipas, bajo el argumento de que no hay abasto.”

Por lo anterior, acudieron al Ayuntamiento de Puebla para exigir la intervención de la presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco. 

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En Canoa y Aparicio exigen atención

Habitantes de dos de las juntas auxiliares de la capital: San Miguel Canoa y San Sebastián de Aparicio, se sumaron al día de protestas.

Los habitantes de ambas juntas realizaron una manifestación a las afueras de las oficinas de la Secretaría de Gobernación municipal.

Vecinos de San Sebastián exigieron el reconocimiento de un nuevo Comité del Agua para la operación del pozo.

Denunciaron a Pedro Mora Cano por no entregar las instalaciones y enriquecerse con un millón de pesos, por lo que exigieron su renuncia y lo llamaron “el cacique del agua”.

En tanto, vecinos de San Miguel Canoa exigieron la liberación de 9 millones de pesos en recursos que desde hace un año no han sido liberados para obras.

Indicaron que estos recursos federales fueron etiquetados a favor de la comunidad; sin embargo, el Ayuntamiento de Puebla no ha querido aplicarlos.

Los quejosos afirmaron que por la falta de dinero no se han ejecutado diversas obras como drenajes, electrificación y la construcción de un pozo, y advirtieron que de no haber solución, cerrarán la autopista Puebla-México debido a la falta de agua.