El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, dedicó la misa de este domingo no sólo a la celebración de la consagración la patrona de la ciudad, Nuestra Señora de la Defensa, sino de todo el personal hospitalario, de los enfermos de coronavirus y de sus familias.

“Por todos nuestros hermanos enfermos, por sus familias que sufren la ausencia de sus seres queridos que están hospitalizados, y por todo el personal médico que ha dejado a sus familias para estar atendiendo a nuestros hermanos”, comentó durante su mensaje.

“De una manera especial por los doctores, doctoras, enfermeros, camilleros y personal de aseo que están en los hospitales apoyando a nuestros hermanos; que el señor les de fortaleza y a nuestros hermanos enfermos, les conceda la salud y pronto se integren a sus familias”, dijo al iniciar la misa dominical.

Durante la ceremonia transmitida, como desde hace dos meses, a través de redes sociales, el clérigo pidió a la patrona de la ciudad “nos defienda de la pandemia”. A razón de la contingencia sanitaria, la Ascensión del Señor —que se celebraría el jueves pasado—, se trasladó a este domingo.

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Al finalizar, Sánchez Espinosa pidió nuevamente a la feligresía atender las recomendaciones de la Secretaría de Salud y de las autoridades gubernamentales.

“Según las noticias, estas semanas son las más difíciles; procuremos estar en casita, procuremos estar en resguardo, procuremos orar en familia y que el Señor nos bendiga”, dijo.

El altar de Nuestra Señora de la Defensa se encuentra en la Catedral de Puebla, en el Altar de los Reyes; es patrona de la Catedral, junto con la Inmaculada Concepción, explicó el arzobispo, adelantando que en estos días también se celebra la figura de María Auxiliadora.