Karen ROJAS | Rompen las cintas o no las respetan Avalan restricción de parques; ignoran reglas por necesidad
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La mayor parte de las bancas estaban ocupadas después de haber retirado los cordones de seguridad.
A pesar de que los ciudadanos avalaron la medida que tomó la Secretaría de Protección Civil y Gestión de Riesgos para restringir la permanencia en parques públicos, por el relajamiento social que hay en la capital muchas personas siguen sin acatar esta disposición.
En un recorrido hecho por El Popular, diario imparcial de Puebla en el parque de El Carmen, el Paseo Bravo y el Zócalo, se evidenció que los poblanos insisten en romper las reglas.
En el parque de El Carmen, diversos grupos de personas rompieron las cintas de acordonamiento para utilizar las bancas del lugar. Se pudo apreciar a personas platicando y parejas comiendo en las bancas, como si se tratara de un día de campo.
La mayor parte de las bancas fueron ocupadas después de haber retirado los cordones de seguridad que fueron colocados para evitar el contacto entre las personas.
Un ciudadano entrevistado, quien rompió una de las cintas, señaló que la medida implementada por la autoridad era buena, pero argumentó que hay personas como él que usan las bancas para esperar mientras realizan algún trámite.
También lee: Contempla gobierno seis proyectos a desarrollar terminando confinamientoFrente al parque de El Carmen se encuentran las oficinas de la notaría pública número 7, en donde poblanos acuden a realizar sus trámites, y por las largas horas de espera que eso representa optan por permanecer sentados en el mobiliario de este espacio público.
Aunque Manuel García está a favor de la medida, destacó que en algunos casos es necesario usar los espacios, porque en el Centro Histórico hay oficinas donde realizan trámites y buscan la forma de esperar, ante la falta de espacio en los inmuebles por las restricciones sanitarias de la contingencia.
“Llegué a las 9 de la mañana a realizar un trámite a esta notaría. No permiten que estemos en el interior de las oficinas por la pandemia, y son muchas horas de espera. A mí me dijeron que regresara a la 1 de la tarde, ¿a dónde me voy?,” señaló.
Aseguró que todas las medidas que tomen las autoridades son buenas; sin embargo, hay personas que por necesidad tienen que utilizar las instalaciones del parque público.
En el caso del zócalo de la ciudad, los poblanos que acuden a este lugar prefirieron estar sentados en el cuadrante de la plancha sin utilizar las bancas, que permanecen acordonadas.
Las personas permanecieron por varios minutos a las orillas del parque, ya fuera para cubrirse del sol, descansar de sus caminatas o simplemente estar con sus parejas.
La mayoría, como lo dio a conocer la Secretaría de Protección Civil y Gestión de Riesgos, eran personas de la tercera edad y parejas de jóvenes que antes de la pandemia acudían a este espacio público.
En el Paseo Bravo, uno de los parques más concurridos y utilizados por los ciudadanos, la restricción para el uso de las bancas también fue ignorada.
Los ciudadanos señalaron que rompieron los cordones para sentarse a esperar el paso de las unidades del transporte público, o para descansar un poco tras realizar sus compras en los comercios que aún permanecen abiertos en el primer cuadro de la ciudad.
Aquellos que acuden a los espacios públicos no están acatando la sana distancia y realizan sus actividades de manera normal.
