Investigarán producción anticipada en automotrices; Barbosa advierte una sanción

El gobernador Miguel Barbosa dijo que corroborarán si las plantas alemanas instaladas en Puebla produjeron autos y de confirmarlo, podrían sancionarlas.

El gobierno estatal investigará si Volkswagen de México reanudó producción pese a decretos que prohibían las actividades no esenciales y, en caso de comprobarlo, podría sancionar a la empresa, anunció el mandatario Miguel Barbosa Huerta.

Según cifras del Inegi, la empresa reportó el ensamble de 8 mil 942 unidades, contrario al anuncio de que el retorno a la planta era sólo para capacitación.

El titular del Ejecutivo expresó que la revisión se realizará a través de la Secretaría de Economía y de confirmar que sí produjeron vehículos, en un claro rompimiento de acuerdos, procederán a la sanción.

Según el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros, del Inegi, Volkswagen produjo 859 unidades del modelo Golf y 4 mil 556 del Nuevo Jetta, además de 3 mil 527 de la Tiguan.

De este total, según datos oficiales, la VW exportó 5 mil 976 unidades, de las 8 mil 942 producidas.

También Audi reportó al organismo el ensamble de 2 mil 59 vehículos de su modelo Q5.

En este caso, la exportación ascendió a mil 597, dentro del segmento de camiones ligeros.

El gobierno federal autorizó la reapertura de industrias a partir del 1 de junio, pero debido al creciente número de contagios de SARS-CoV-2 en la entidad, el gobernador emitió un decreto en el que afirmó ausencia de condiciones sanitarias para que retornaran las actividades.

A mediados de junio tanto Volkswagen como Audi abrieron sus puertas, con el argumento de capacitación, y sólo con 30 por ciento del personal.

Realizan consulta

Mientras el gobierno puso marcaje sobre las automotrices, los agremiados del Sindicato Independiente de la Industria Automotriz, Similares y Conexos, Volkswagen (SITIAVW), participaron en una consulta para definir la prorrogación o no de la negociación del contrato colectivo de trabajo.

Mientras el personal de base participó al interior de la fábrica, los empleados considerados dentro del grupo vulnerable acudieron a las instalaciones sindicales.

Al ingresar debían portar cubrebocas y se les colocó gel antibacterial para poder emitir su voto dentro del inmueble.

Se habilitaron dos puertas, una de entrada y otra para la salida, como parte de las condiciones en las que se realizó la votación, con la intención de evitar aglomeración de personas.

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