Pese al rompimiento del confinamiento de ciudadanos pese a que en la capital poblana se mantiene en semáforo rojo por contagios de Covid-19, a partir de este 13 de julio se pondrá en marcha la reapertura parcial de calles del Centro Histórico.

Sin embargo, el comportamiento social podría adelantar antes de lo planeado su cierre de nueva cuenta.

Tan sólo el semana, previo a la reapertura de 3 accesos al primer cuadro de la ciudad, se registró una grave concentración de personas en el Paseo Bravo lo que obligó a la autoridad a implementar un dispositivo para retirar a las personas que se encontraban en masa en este espacio público.

Tras el anuncio, el Ayuntamiento de Puebla condicionó la apertura a una evaluación de las calles Av. Reforma (desde la 11 Norte-Sur hasta la 3 Norte- Sur); la calle 2 Oriente con 2 Norte y la 4 Poniente con 11 Norte.

Mientras estas calles serán reabiertas al paso, se mantendrá el cierre en el cuadrante comprendido de la 3 Oriente-Poniente de la 5 de Mayo a 11 Norte-Sur; la 4 Poniente a la 18 Oriente-Poniente sobre 2 Norte-Sur; y de la 18 Oriente-Poniente de la 11 Norte-Sur hacia la 4 Poniente.

Para el secretario de Protección Civil y Gestión de Riesgos, Gustavo Ariza Salvatori el comportamiento de las personas obligará a las autoridades a volver a cerrar estás avenidas.

En este sentido, destacó que por el rompimiento del confinamiento social que se ha presentado en la ciudad y espacios dentro del primer cuadro de la zona de monumentos, obligará a las autoridades a retomar la restricción.

El funcionario aseveró que tomando en consideración el comportamiento ciudadano, bastará solo unos días para evaluar el cierre inmediato al centro histórico.

"Si bien se autorizó la apertura parcial de las calles, insistimos en que hay un grave comportamiento social que en pocos días ocasionará otra vez el cierre. Lo vimos este fin de semana en el Paseo Bravo, con la aglomeración de personas sin el más mínimo respeto a las restricciones", dijo.

Ariza Salvatori precisó que durante la reapertura a las calles propuestas por el Ayuntamiento de Puebla en conjunto con el sector empresarial, se medirá la movilidad de las personas a través de dispositivos realizados por Gobernación, Movilidad, Normatividad y Protección Civil.

"Lamentablemente no hay manera de hacer entender a las personas sobre los riesgos. No encontramos con muchas personas reunidas en espacios públicos, organizando fiestas, usando canchas, caminando sin cubreboca, no entienden por eso no creo que dure mucho la apertura parcial en el centro".

Ariza Salvatori consideró que la evaluación y medición de la apertura de las calles tendrá un desenlace anticipado tomando en cuenta el semáforo, el nivel de contagios y el comportamiento social que se vive en Puebla.

Desde el pasado 20 de abril 60 manzanas fueron cerradas al paso por parte de la autoridad municipal para frenar la movilidad permitiendo solo el paso para actividades esenciales, situación que a la fecha no fue respetada por los poblanos.