Adultos mayores son los que más padecen ansiedad y depresión por confinamiento

El encierro no sólo afectó la vida laboral de los adultos mayores, debido a que cuatro de cada diez son económicamente activos, sino que también limitó sus internaciones sociales.

El confinamiento provocado por la pandemia de Covid-19 ha afectado a todas las personas en México, aunque, son los adultos mayores el sector más castigado no sólo por ser población de riesgo, sino por las condiciones de abandono y precariedad económica en la que viven, lo que puede provocar que 4 de cada 10 personas de la tercera edad presenten síntomas de depresión y ansiedad por el encierro.

Así lo informó Sergio Juárez Rugerio, docente de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), en conferencia de medios virtual en donde también indicó que en Puebla hay aproximadamente 400 mil adultos mayores, y el número aumenta cada año por lo que las políticas públicas deben orientarse a atender las necesidades de este sector.

Además del abandono, las enfermedades crónicas como la diabetes, hipertensión, obesidad y problemas cardiovasculares son de los padecimientos que más aquejan a este sector, así como las enfermedades como la demencia senil y el alzheimer; esto hace más complicada la vida de las personas de la tercera edad.

Para hacer frente a la ansiedad y depresión, el docente invitó a los adultos mayores, y a sus familiares, a utilizar la tecnología para acercarse y ver en el confinamiento una oportunidad de disfrutar de la música y el arte, aunque también refirió que no todos tienen el acceso a la tecnología.

“Para paliar los efectos negativos del confinamiento, los adultos mayores deben buscar la manera de mejorar sus relaciones interpersonales, platicar con sus vecinos o con la gente que tengan cerca; distraerse con música y películas; ingresar al mundo de la tecnología y hacer paseos por los parques cercanos, sin poner en riesgo su salud, para que de esta manera sobrellevar el confinamiento”, abundó

Por último, hizo un llamado a fortalecer la protección de los adultos mayores que tienen que regresar a laborar en los próximos días, y los que ya se encuentran trabajando, para que se garantice su seguridad sanitaria. De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) 41.4 por ciento de los adultos mayores es económicamente activo y esto los hace más vulnerables.

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