La delincuencia e inseguridad en Puebla no descansó, para ellos no hubo pandemia, ni contagios, reconoció el secretario de Seguridad Pública estatal (SSP), Raciel López Salazar.

Al ser cuestionado por los diputados en su comparecencia ante el Congreso local, el funcionario estatal admitió que al menos durante el tiempo del Covid-19 en 2020 la delincuencia siguió “trabajando”, es decir, continuaron los delitos.

Argumentó que, si bien bajó la movilidad de las personas ante los confinamientos que ha aplicado el gobierno estatal, los delitos se siguen cometiendo, sin dar a conocer los números negativos.

Pese a ello, presumió que en los últimos 10 meses las detenciones se incrementaron en 270 por ciento, en comparación con el periodo comprendido entre agosto de 2019 a febrero 2020, cuando se detuvieron a 932 presuntos delincuentes.

Además, se debilitaron a 177 bandas delictivas, entre las que se encuentran la de “El Loco Téllez”, “El Moco”, “El Grillo” y/o “La Patrona”, El Chupón”, “Los Sinaloa”, La Tita”, “La Maldita Vecindad”, “HEM-26”, “El Patotas”, “Las Bigotonas”, “El Masero” y “Angelinos 13”, entre otras.

Aseguró que en 17 de los 18 delitos considerados de alto impacto se disminuyó significativamente la incidencia, destacando el secuestro (-61.43 por ciento), robo a transportista (-54.58 por ciento), robo de autopartes (-40.86 por ciento), robo en transporte (-41.16 por ciento), trata de personas (-23.53 por ciento) y el robo a negocio (26.23 por ciento).

En tanto, respecto a la tasa de criminalidad, Puebla se posicionó en el lugar número 21; es decir, 6 lugares por debajo de la media nacional con solo 953 eventos por cada 100 mil habitantes.

Durante el periodo que informó, dijo que fueron recuperados mil 284 vehículos con reporte de robo; 694 fueron asegurados por estar involucrados en la comisión de diversos delitos y 225 en estado de abandono. También se decomisaron 384 armas de fuego, así como 4 mil 79 cartuchos útiles.

López Salazar agregó que se aseguraron 3 mil 322 litros de diésel; 149 mil 275 litros y 95 cilindros de gas LP; y 62 mil 839 y nueve contenedores de hidrocarburo. Es decir, 215 mil 436 litros de combustible presumiblemente robado.