El Paseo Bravo es uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Puebla. Incluso en la actualidad se considera el punto de reunión por excelencia de muchas personas.

La ubicación del Paseo Bravo lo coloca en un punto medio para muchos ciudadanos. Ya que comienza en la Avenida Reforma y termina alrededor de la 13 Poniente. El corredor está decorado con diversos árboles, los cuales cuentan con decenas de años de antigüedad, así como con fuentes, bancas y pequeños monumentos que se fueron agregando al pasar de su historia.

A pesar de que en el Paseo Bravo existen muchas piezas emblemáticas, una de sus estructuras más conocidas y utilizada de referencia es el famoso Gallito, una pieza central . 

Fue inaugurado en 1921 y cedido por la colonia francesa de Puebla con motivo del centenario de la consumación de la Independencia de México. 

Este reloj se ha convertido en un punto de reunión emblemático para los habitantes de la ciudad, especialmente para convocar protestas o mítines.

Con el pasar de los años el Paseo Bravo se ha ido transformando, pasando de ser una alameda, tener un pequeño zoológico, hasta contar con juegos mecánicos,. Sin embargo todo se resume en lo mismo, un punto de reunión para los poblanos.

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El comercio informal se volvió parte del Paseo Bravo, sitio que se ha vuelto un punto de encuentro para concretar las transacciones que se hacen a través de redes sociales, generalmente por las famosas nenis. 

Dónde generalmente se puede comerciar con ropa, nueva o de paca; cubrebocas, juguetes usados, cosméticos y artículos nuevos o de segunda mano, los cuales son vendidos por personas que convierten las cajuelas de sus automóviles en mostradores o que llevan grandes bolsas con toda su mercancía para ofertar o simplemente entregar.

Antes de la pandemia muchos de estos comerciantes usaban como punto de encuentro El Gallito para cerrar las ventas que se pactan en Facebook, sin embargo se había vuelto una práctica clandestina pues en su momento personal de Vía Pública del Ayuntamiento de Puebla implementó operativos de decomiso de mercancía.

Así mismo el lugar es utilizado para realizar mítines de partidos políticos y reuniones de colectivos feministas, pro vida; incluso para los activistas cannavicos.