El conductor del vehículo perdió el control y terminó impactándose contra un árbol Carlos MÉNDEZ NUEVAMENTE EL exceso de velocidad cobró víctimas mortales en un percance automovilístico. En esta ocasión, las víctimas fueron dos jóvenes que circulaban a bordo de un automóvil Nissan Sentra, con placas de circulación XUK-8442 del estado de Tlaxcala, quienes perdieran la vida tras impactarse de manera violenta contra un árbol ubicado sobre el bulevar Héroes del 5 de Mayo y la 43 Poniente. De acuerdo con los primeros reportes, este hecho ocurrió la madrugada de ayer, alrededor de las 01:45 horas, en la zona antes referida. Los dos jóvenes que perdieron la vida a consecuencia de las lesiones producidas por este incidente vehicular fueron identificados con los nombres de Alejandro Rojas Rangel de entre 20 a 23 años y que se desempeñaba como Ministerio Público adscrito al fuero común y que al momento del incidente era el conductor del vehículo, y Yoelis Castro Herrera, copiloto y estudiante de intercambio en la licenciatura en Derecho de la BUAP de procedencia colombiana. Los primeros peritajes indicaron que al momento de circular a bordo del vehículo Sentra, con aparente exceso de velocidad, Rojas Rangel perdió el control de su unidad, impactándose en primera instancia contra un anuncio del Ayuntamiento capitalino y posteriormente subirse al camellón de esta vialidad, para terminar chocando contra un árbol de la zona, esto hizo que el vehículo quedara totalmente deshecho con sus tripulantes prensados y sin vida. Tras el llamado de emergencia a paramédicos del Número de Emergencias 066, estos arribaron y con equipo de rescate urbano realizaron las labores de extracción de cuerpo, para que el agente del Ministerio Público pudiera realizar las diligencias de levantamiento de cadáver a cargo del agente del Ministerio Público, Víctor Castañeda Carrillo. Finalmente, estos hechos quedaron asentados en la averiguación previa 1083/2011/ECNTE, donde se asentó que los cuerpos no presentaban olor etílico, por lo que este incidente únicamente se debió al exceso de velocidad, mientras que los nombres fueron obtenidos de identificaciones que llevaban, cuyas fotografías coinciden con sus rasgos. |