*El hombre hallado en San Francisco Ocotlán no murió a golpes, como se había especulado  Carlos MÉNDEZ Víctor HERNÁNDEZ  CORONANGO.- UN hombre de 36 años, identificado a través de una licencia de conducir encontrada entre sus pertenencias con el nombre de Julio Montejo Pascual, fue encontrado sin vida alrededor de las 06:00 horas del sábado en la localidad de San Francisco Ocotlán, en el municipio de Coronango, entre la avenida Los Ángeles y calle División del Norte. Tras ser reportado este hallazgo por vecinos de la dirección referida a los números de emergencia, el comandante de la Policía Municipal de Coronango, Miguel Galicia, arribó a este lugar acompañado de la unidad P-002 y la unidad 012 del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA), quienes hicieron efectivo el hallazgo de un cadáver perteneciente a un varón, el cual estaba a medio camino de terracería con la cara hacia arriba y con rastros de sangre alrededor del cuello, el cual ya no contaba con signos vitales. El cadáver vestía un pants azul, playera blanca de manga larga con vivos en color verde, tines azules y un solo tenis blanco con naranja. Algunas versiones indicaron que el cuerpo de Julio Montejo Pascual habría sido arrojado desde una camioneta en movimiento. Al realizarse el levantamiento de cadáver correspondiente, se pudo conocer que el cuerpo presentaba un disparo de arma de fuego en la cabeza y golpes en las costillas del lado derecho, además de encontrarse ensangrentado, mientras que en la mano tenía una cadena de oro. De acuerdo con declaraciones de los vecinos del lugar, éstos informaron que esta zona es considerada por los pobladores de San Francisco Ocotlán como de alta peligrosidad, debido a que carece de alumbrado y por la gran cantidad de bares y tugurios en esta zona, mientras que hace dos años tiraron otro cuerpo cerca de este punto. Tras el hallazgo de este cadáver trascendió que este hombre tuvo su domicilio en el municipio de San Andrés Cholula, mientras que dentro de los posibles móviles de este homicidio se descartó un probable asalto, pues entre sus ropas se le encontró su billetera con 120 pesos en efectivo -un billete de 100 pesos y uno de 20-, mientras que al momento de las diligencias correspondientes de levantamiento de cadáver un celular en su poder se encontraba sonando toda la mañana, mientras que el cuerpo presentaba un fuerte olor a alcohol. A casi 48 horas de que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) iniciara la investigación sobre el caso, pocos son los avances, sin embargo, se confirmó que el ahora occiso fue ejecutado de un balazo en la nuca, haciendo suponer que la bolsa con la que estaba cubierto le fue colocada para evitar que el derramamiento de sangre en la camioneta con la que trasladaban. Así mismo, quedó asentado que su muerte fue instantánea, debido a que la bala le entró por la nuca y salió por la frente, a la altura de los ojos, así se determinó con la prueba pericial correspondiente. A pesar de que los hechos ocurrieron en territorio que es jurisdicción del Ministerio Público de San Pedro Cholula, fue personal de la fiscalía de homicidios el que se hizo cargo de las primeras diligencias. Según la averiguación previa 16/2012/EH, el occiso quedó registrado como el desconocido número 14. Aunque las fotos de algunas identificaciones coinciden con las características fisonómicas de Montejo Pascual, hasta ayer, al cierre de esta edición, nadie se había apersonado a reclamar los restos y a reconocerlo de manera oficial. Finalmente, existe la posibilidad de que el ahora occiso estuviera conviviendo con su o sus victimarios, ya que estaba alcoholizado al momento de ocurrir los hechos, que según el cronotanatodiagnóstico al momento del hallazgo, se registraron alrededor de las 3:00 horas.