*Se presume que el hombre pudo haberse quitado la vida debido a que se encontraba deprimido  Texto y fotos: Carlos MÉNDEZ  Una posible depresión pudo haber sido la causa por la cual un hombre de 65 años pudo haberse quitado la vida, luego que éste presuntamente se arrojara del octavo piso de un edificio ubicado sobre la 11 Poniente y la esquina de la 13 Sur, en el Barrio de Santiago. Los primeros reportes indicaron que el deceso de este hombre fue reportado por personas que caminaban por la dirección referida, que se encuentra a escasos metros del Paseo Bravo, por lo que de inmediato paramédicos del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA) arribaron a este punto, confirmando únicamente el deceso de este hombre. El vigilante de este edificio, quien manifestó que este hombre era su compadre, señaló que en vida llevó el nombre de Jacobo Melo y que minutos antes del hecho había ido a visitarlo, pues éste solía ir a platicar con él y dar de comer a unos gallos que el mismo vigilante tenía en la azotea del edificio. Fue por este motivo que al encontrarse en la azotea del inmueble, Jacobo Melo de manera sorpresiva se lanzó al vacío, perdiendo la vida al momento de la violenta caída. Tras este hecho, el vigilante apuntó que su compadre se encontraba deprimido, pues este padecía diabetes, enfermedad que gradualmente lo estaba dejando ciego, sin embargo, una segunda versión indicó que a consecuencia de este mal, el hombre no se percató que estaba a la orilla de la azotea y cayó por accidente. De igual manera, el compadre del occiso informó que durante su plática el finado le comentó que sería operado en los próximos días, debido al mal que le aquejaba, quedando todo esto asentado en las indagatorias iniciadas por el Ministerio Público, quienes realizaron las diligencias de levantamiento de cadáver tras este deceso.