Identifican a occiso de La Resurrección
|
*Se trata de Juan Carlos Magos Padilla, quien tenía su domicilio en la junta auxiliar de Zaragoza Víctor HERNÁNDEZ 
Se reportaron los primeros avances en la investigación que la fiscalía de homicidios inició tras el hallazgo de un cadáver en la junta auxiliar de La Resurrección, que presentaba un impacto de bala en la nuca. La madrugada de ayer fue identificado y, se sabe, era un comerciante de ropa que tenía su domicilio en otra junta auxiliar, la de Zaragoza. Una mujer de nombre Laura Montaño Palestino se apersonó en las instalaciones de la agencia del Ministerio Público, autoridades de la misma la trasladaron a la morgue e identificó el cadáver hallado por la tarde en el paraje Tlacotero, como el de su concubino, Juan Carlos Magos Padilla, quien contaba con 28 años de edad. El ahora occiso era originario del Distrito Federal pero llevaba varios años radicando en la ciudad de Puebla, se dedicaba a la venta de playeras y, según su pareja, no tenía problemas, por lo que ignora quién o quiénes pudieron haber asesinado a Juan Carlos. De acuerdo con información que está asentada en la averiguación previa 34/2012/EH, Magos Padilla murió a consecuencia de un disparo de arma de fuego –no se ha determinado el calibre– que recibió en la nuca y se alojó en la frente, de ahí, dijeron los especialistas, que tuvieran los ojos excesivamente hinchados. La fuente abundó que el ahora occiso vestía su ropa adecuadamente y que al momento de ser encontrado en el paraje de referencia, cerca de la barranca Hueyatla, estaba bocabajo. Sin embargo, no se encontraron indicios que permitieran establecer que ahí se había cometido el crimen, pues no se halló el cartucho percutido. Laura Montaño refirió que la última vez que vio con vida a Juan Carlos fue el martes en la mañana, cuando salió de su domicilio ubicado en el bulevar Vicente Suárez, de la junta auxiliar Ignacio Zaragoza, y que llevaba unas pacas de playeras que iba a vender. Pero Magos Padilla ya no regresó, y no tuvo noticias suyas sino hasta el jueves por la noche, ya casi madrugada de ayer, cuando le avisaron que Juan Carlos estaba muerto y que debía presentarse a identificarlo. Tras la necropsia, se determinó que el homicidio ocurrió entre 18 y 24 horas antes de que fuera encontrado, y presumiblemente fue llevado hasta el lugar en un vehículo de características desconocidas.
Se reportaron los primeros avances en la investigación que la fiscalía de homicidios inició tras el hallazgo de un cadáver en la junta auxiliar de La Resurrección, que presentaba un impacto de bala en la nuca. La madrugada de ayer fue identificado y, se sabe, era un comerciante de ropa que tenía su domicilio en otra junta auxiliar, la de Zaragoza. Una mujer de nombre Laura Montaño Palestino se apersonó en las instalaciones de la agencia del Ministerio Público, autoridades de la misma la trasladaron a la morgue e identificó el cadáver hallado por la tarde en el paraje Tlacotero, como el de su concubino, Juan Carlos Magos Padilla, quien contaba con 28 años de edad. El ahora occiso era originario del Distrito Federal pero llevaba varios años radicando en la ciudad de Puebla, se dedicaba a la venta de playeras y, según su pareja, no tenía problemas, por lo que ignora quién o quiénes pudieron haber asesinado a Juan Carlos. De acuerdo con información que está asentada en la averiguación previa 34/2012/EH, Magos Padilla murió a consecuencia de un disparo de arma de fuego –no se ha determinado el calibre– que recibió en la nuca y se alojó en la frente, de ahí, dijeron los especialistas, que tuvieran los ojos excesivamente hinchados. La fuente abundó que el ahora occiso vestía su ropa adecuadamente y que al momento de ser encontrado en el paraje de referencia, cerca de la barranca Hueyatla, estaba bocabajo. Sin embargo, no se encontraron indicios que permitieran establecer que ahí se había cometido el crimen, pues no se halló el cartucho percutido. Laura Montaño refirió que la última vez que vio con vida a Juan Carlos fue el martes en la mañana, cuando salió de su domicilio ubicado en el bulevar Vicente Suárez, de la junta auxiliar Ignacio Zaragoza, y que llevaba unas pacas de playeras que iba a vender. Pero Magos Padilla ya no regresó, y no tuvo noticias suyas sino hasta el jueves por la noche, ya casi madrugada de ayer, cuando le avisaron que Juan Carlos estaba muerto y que debía presentarse a identificarlo. Tras la necropsia, se determinó que el homicidio ocurrió entre 18 y 24 horas antes de que fuera encontrado, y presumiblemente fue llevado hasta el lugar en un vehículo de características desconocidas. 
