El occiso hacía su demostración cuando la gasolina y el fuego alcanzaron su ropa; quedó envuelto en llamas en cuestión de segundosVíctor HERNÁNDEZ La noche del viernes 25 de mayo, varias personas que circulaban por la 25 Oriente y el Bulevar 5 de Mayo, vieron con asombro una tea humana que corría y pedía auxilio en toda esa zona, hasta que llegaron paramédicos del 066 y le brindaron los primeros auxilios; ayer se reportó la muerte de ese hombre. Durante once días recibió atención y cuidados en el área de quemados del Hospital General del Norte, a la cual ingresó aquella noche con quemaduras de segundo y tercer grado por fuego directo, en el 64 por ciento de la superficie corporal. Sin embargo, una complicación con sus heridas le provocó la muerte el lunes por la tarde en ese nosocomio. Una fuerte infección en sus heridas le provocó la muerte, según revelaron los resultados de la necropsia. La víctima fue identificada como Ramón Pérez Silva, de 32 años de edad, que tenía su domicilio en la colonia 8 de Diciembre, y que se ganaba la vida como tragafuegos en el crucero donde ocurrieron los hechos; “lo veíamos todas las noches”, dijeron algunos vecinos de la zona. El día que ocurrió el incidente, el ahora occiso hacía su demostración cuando un poco de combustible (gasolina) y el fuego alcanzaron su ropa, que quedó envuelta en llamas en cuestión de segundos. Algunos peatones y automovilistas que presenciaron la macabra escena le brindaron ayuda y minutos después, paramédicos del 066 llegaron para estabilizarlo y llevarlo de inmediato al nosocomio donde estuvo internado los 11 días. Pérez Silva fue identificado por uno de sus hermanos, quien compareció en la agencia del Ministerio Público de Homicidios pero pocos datos pudo aportar, pues refirió que a él sólo le avisaron del accidente, no estaba con él. Luego de tomar conocimiento del fallecimiento, el fiscal en turno de dicha área acudió al Hospital General del Norte, realizó las diligencias correspondientes e inició la constancia de hechos 244/2012/EH.