**Atraco a la Iglesia de San Sebastián Zinacatepec; se presume un monto de 30 mil pesos Víctor HERNÁNDEZ LA PROCURADURÍA General de Justicia ya se encuentra en la pesquisa de datos que ayuden a esclarecer el robo cometido a las oficinas de la iglesia de San Sebastián Zinacatepec, en la región de Tehuacán; cabe mencionar que el templo sufrió el atraco del dinero correspondiente a las aportaciones de los feligreses, así como los recursos que fueron reunidos para realizar obras en el interior del templo, mismos que fueron sustraídos de la oficina parroquial. El hecho ha causado gran indignación entre los habitantes de la comunidad, quienes no dan crédito a semejante acto y no creen que en pleno centro de la comunidad y a escasos metros de donde se encuentra la comandancia de la Policía Municipal, se haya perpetrado tan desleal acto ilícito. Testigos han informado que aunque se reportó el acto a los uniformados, estos tardaron en atender la llamada de auxilio que se realizó a los números de emergencia, lo que posibilitó que los responsables contaran con tiempo suficiente para darse a la huida. Por su parte, las autoridades religiosas aún no especifican el monto total de lo robado, pero trascendió que se estima en la cantidad de 30 mil pesos, los cuales contenían las aportaciones por concepto de diezmos, limosnas, dinero recolectado, donaciones y aportaciones voluntarias que serían canalizados a las obras de la parroquia. Agregaron que el robo quedó al descubierto cuando el personal que labora en la iglesia no pudo abrir la puerta de acceso a las oficinas pues estas se encontraban aseguradas en el interior, motivo de sospecha suficiente para que se diera aviso a los elementos de Seguridad Pública y pedir su intervención, mismos que procedieron a realizar la apertura de las oficinas y percatarse del atraco del que habían sido objeto; en un primer momento se señaló que los sacrílegos delincuentes entraron por una pequeña ventana de las mismas oficinas. De inmediato, el personal de la iglesia llevó a cabo una exhaustiva revisión para verificar si el templo no había sufrido robo de arte sacro, posibilidad que descartaron; al contrario de esta situación, la oficina del párroco mostraba signos de revisión por lo que notaron que faltaba el dinero que ahí se resguardaba. En la averiguación previa que inició la agencia del Ministerio Público de Tehuacán, quienes rindieron su declaración dijeron sospechar de un sujeto que días antes y de manera insistente, preguntaba por el sacerdote y el horario en que podría encontrarlo; sin embargo, ya se están llevando a cabo las pesquisas correspondientes para identificar a este sujeto o a los posibles responsables del atraco. Es preciso mencionar que en un principio, las autoridades eclesiásticas se negaron a presentar la denuncia correspondiente porque aseguraron que sería en vano realizar esta acción, pero fuentes cercanas a la fiscalía de aquel distrito judicial confirmaron que días después cambiaron su postura y dieron conocimiento de lo ocurrido a la PGJ por medio de una denuncia formal contra quien resulte responsable. Lo que sí es un hecho, es que debido a que trascurrieron varios días, y a que el lugar donde ocurrieron los hechos ha sido manipulado o contaminado, las labores del personal de Servicios Periciales han visto entorpecido su accionar.