La propietaria fue amarrada y sometida con arma de fuego, el ilícito se cometió a plena luz del día Al lugar asistieron varios cuerpos de seguridad; policías estatales, ministeriales, agentes de Vialidad del Estado e inclusive el Ejército mexicano Los asaltantes también se apoderaron de documentación diversa; jarrones con chapa de oro, otros accesorios que sustrajeron de la residencia y de la factura de la camioneta Víctor HERNÁNDEZ [gallery link="file" columns="4"] INTENSA MOVILIZACIÓN policiaca, e inclusive militar, se registró la tarde de ayer en las inmediaciones de la colonia Santa Cruz Buenavista, luego de que tres sujetos lograran ingresar a un lujoso fraccionamiento de la zona para someter, a mano armada, a la propietaria de una casa, para después dejarla amarrada y robarle una camioneta que posteriormente abandonaron calles adelante. Los probables responsables, según testigos, huyeron a bordo de una camioneta Nissan Murano de color blanco, con la cual pudieron ingresar al fraccionamiento Concepción La Cruz, para perpetrar el ilícito. A pesar de los recorridos de las diferentes policías que atendieron la llamada de auxilio, no se logró dar con los responsables. A las 14 horas, elementos de las policías municipales de Puebla y San Andrés Cholula, policías estatales, ministeriales, agentes de Vialidad del Estado e inclusive el Ejército Mexicano, arribaron a la gasolinería Cualli 4818, ubicada en la Calzada Zavaleta, a unos metros de la prolongación de la 25 Poniente. En el estacionamiento del lugar, afuera de una tienda Oxxo, se encontró una camioneta Chevrolet Captiva de color guinda, con placas de circulación TWN 72-92 del estado de Puebla, la cual había sido reportada como robada, minutos antes. La unidad fue reconocida por parte de Teresa Ramírez Solano, quien iba a bordo de una patrulla de la Policía Municipal que la trasladó de su casa al lugar de los hechos. Posteriormente fue en una unidad de Vialidad del Estado que se le trasladó a la agencia del Ministerio Público, para que presentara su denuncia. Ramírez Solano dijo que poco después de las 13 horas, escuchó que tocaban a la puerta, por lo que salió a abrir y fue en ese momento que un sujeto de complexión robusta, estatura media y tez morena, la empujó violentamente y le ordenó que se callara. Una vez dentro del inmueble la tiraron al suelo y la amarraron de pies y manos, lo mismo le paso a uno de sus empleados, que en ese momento se encontraba con ella. “Varias veces me preguntaron que dónde estaba el dinero y yo les decía que no tenía, entonces uno de ellos me dijo que si lo encontraban, me iba a ir mal, luego me preguntaron por las joyas, esas sí se las llevaron, incluidos tres relojes de mi difunto marido”, refirió la mujer, quien aún se notaba nerviosa por el incidente. Los asaltantes también se apoderaron de documentación diversa, y de la factura de la camioneta Captiva, en la cual se dieron a la fuga no sin antes subir jarrones con chapa de oro y otros enseres y accesorios que sustrajeron de la residencia. Sin embargo el empleado de la agraviada logró soltarse y llamar al número de emergencias 066, por lo que se alertó a los cuerpos de seguridad pública sobre el asalto ocurrido, y de las características de la camioneta robada. Los delincuentes optaron por abandonarla en la gasolinera, luego de darse cuenta que una patrulla de Vialidad del Estado se encontraba en la esquina próxima, por lo que desistieron de llevarse la camioneta. El lugar quedó acordonado y resguardado por policías municipales, en espera de que arribara el agente del Ministerio Público para llevar a cabo las diligencias correspondientes.