Informe gris

El secretario de Seguridad Pública y Tránsito Municipal rindió la mañana del día de ayer un informe plagado de omisiones [gallery ids="40101,40102,40103,40104"] AMADEO LARA Terrón rindió su informe de actividades del último año, esto en el marco del segundo aniversario de la administración que encabeza Eduardo Rivera. La rendición de cuentas del secretario estuvo plagada de lagunas informativas, en las cuales nunca se especificó el número de elementos de la policía capitalina, la cantidad de patrullas para realizar labores de vigilancia o el equipamiento de los grupos especiales con los que cuenta el cuerpo policiaco del ayuntamiento. El informe del secretario, tampoco señaló las cifras, números, estadísticas o algún tipo de dato donde pudiera dar cuenta de las actividades delictivas que se desarrollan en la ciudad. No se tocó el tema acercad de cuales ramas de la delincuencia se han incrementado o han sido controladas por la seguridad pública. Ante los constantes cuestionamientos que en días pasados figuras políticas hicieron a su actuación al frente de la seguridad en el municipio, Lara Terrón no tuvo más remedio que aceptar que esta problemática está presente en la entidad. Expreso que 2.5 poblanos de cada 10 han tenido o padecido algún efecto de inseguridad en su entorno cercano. Es decir, que casi el 25 por ciento de los poblanos, lo que equivaldría a más de 400 mil personas, han sido víctimas de la delincuencia. Además, tan sólo cuatro de cada 10 habitantes de la capital se han sentido beneficiados por las acciones de seguridad pública. Detalló que su administración ha detectado problemas de inseguridad en al menos 100 colonias de la capital. Posterior al informe y ante los constantes cuestionamientos de la prensa en relación a los datos que había omitido, el encargado de la seguridad pública capitalina se vio obligado a admitir que el municipio de Puebla cuenta apenas con 1450 elementos de seguridad que se encargan de vigilar a diario a los más de 1 539 819 poblanos. LO QUE SÍ DIJO Los elogios para sí mismo así como para su personal fueron lo que más subrayó Lara Terrón. Rebasado en lo que a seguridad se refiere, el titular de la SSPTM no tuvo más remedio que informar acerca del uniforme de gala que se ha dado a los cuerpos policiacos para dignificar la labor, también resaltó el nuevo himno que tiene la policía municipal, donde en el estribillo se puede escucha la frase “la ciudad que queremos”. Amadeo Lara destacó la instalación de 318 cámaras en calles de la entidad y prometió la instalación de 300 más, aunque esta meta tendrá que cumplirse con el apoyo del gobierno estatal. El servidor público, en un templete montado en la zona de los Fuertes, aseguró de igual manera que se aumentará en un 20 por ciento los salarios que perciben los efectivos municipales, posicionando al cuerpo policiaco de la capital poblana como el mejor pagado en la entidad, aunque de igual forma omitió la cantidad de dinero que perciben los elementos. Concluyó señalando las metas de su dependencia en donde se espera que se integren 200 efectivos más durante este año, estos provenientes de la academia de policía, la cual hasta el momento ha formado a 194 efectivos y donde 49 cadetes más se graduarán en el mes de abril. CRÓNICA Le nublan la fiesta a Lara Terrón Mientras los oficiales hacían un esfuerzo por leer el pequeño papel con la letra del vitoreado y recién creado himno de la policía municipal, una pancarta con la leyenda de “Amadeo Lara Terrón defiende a sus policías corruptos”, nublaba aún más la tarde que ya era gris del secretario de Seguridad Pública y tránsito municipal. Minutos antes, algunos reporteros ya firmaban lo que sería un informe de actividades poco trascendental. “No dijo nada, cuántos asaltos, cuántos robos a casa habitación, cuántos detenidos o procesados” señalaba un compañero en la mesa que se le había instalado a la prensa. Con el gesto de preocupación en el rostro por tener información poco importante del evento, la nota para los medios vino del exterior. Uno joven de nombre Alan Joaquín Quiroz Mejía se presentaba a la sede del informe del encargado de la seguridad pública municipal para encarar a éste. Con pruebas, números de expedientes y resoluciones jurídicas llegó al cerro de los fuertes de Loreto y Guadalupe a demeritar el trabajo que el secretario acababa de presumir. El argumento del joven fue muy simple, abuso de autoridad ante él lo que terminó con la consignación de su vehículo el cual mientras estuvo en el corralón municipal fue despojado de piezas fundamentales y hasta de la gasolina, además de ser devuelto con diversos golpes en diferentes zonas de la unidad. Con una voz temblorosa y con un nerviosismo palpable, Quiroz Mejía dio los nombres de los agentes que expresó “violentaron sus derechos humanos”: Juan Carlos Sánchez Palafox y Rafael Ortega Loranca, los policías que según el joven son los protegidos del servidor público. El joven reconoció que fue amenazado de muerte por los oficiales cuando presentó la queja en las oficinas de Asuntos Internos de la Comisión de Honor y Justicia de esta entidad. Con la atención de todos los medios de información, quienes habían abandonado el evento para cubrir la que sería la nota, Quiroz Mejía señaló que tiene una orden federal para resarcir los daños ocasionados por la secretaría de seguridad pública del municipio y que esta asciende a 150 mil pesos. “Ellos me tienen que pagar no porque sean buenas personas, sino porque tengo una orden federal para que así lo hagan”, señaló para poco después agregar que en reuniones con el titular de la SSPTM, éste señaló que pagarían los daños siempre y cuando quitara las denuncias hacías los uniformados señalados. Al terminar su informe, los medios rodearon al encargado de la seguridad capitalina, quien reconoció el problema sin llegar a dar detalles de cuál será el proceso a seguir, poco después salió a tomarse la foto con los elementos que dirige y compartir transporte con el presidente municipal para salir de ahí.