Resbala caco y lo detienen “Cae” caco
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Un asaltante tropezó dos veces cuando intentaba huir del lugar del atraco; en la segunda ocasión chocó contra un tubo Jorge FONSECA 
Muy mala pata tuvo un caco que asaltó un establecimiento OXXO la noche del viernes. El ladrón, al intentar la huida, tropezó en dos ocasiones, en la última golpeó su cara en uno de los postes contra choques que están en el estacionamiento de la mencionada tienda, al quedar noqueado, los clientes y dependientes de la tienda lograron detenerlo y entregarlo después a la policía. Los hechos tuvieron lugar la noche del viernes, poco antes de que ese día llegara a su fin. De acuerdo con las versiones extraoficiales, un ladrón solitario, que ahora sabemos se llama Julio Paz Mendoza, y que cuenta con 52 años de edad, llegó al establecimiento del OXXO del bulevar Valsequillo y privada de la 16 de Septiembre, de la colonia Las Palmas. Tras ingresar fue de manera directa al aparador donde estaban los empleados, los amagó con un arma, al parecer de fuego, y con ella les exigió que le dieran todo el dinero. Sin oponerse, lo obedecieron y le dieron el dinero de la caja registradora: entre 800 y mil pesos. El ambicioso sujeto no se conformó con ello, saltó el aparador y al estar del otro lado exigió a los empleados que abrieran la caja fuerte. Estos le contestaron que no podían porque no cuentan con las claves de acceso a la misma. El ladrón, al no creer en su palabra, colocó la pistola en su cintura y sacó de entre sus ropas una especie de lámpara que además sirve para dar descargas eléctricos. Con ese aparato dio una descarga eléctrica a una de las empleadas, a quien le colocó el artefacto en el abdomen. Al ver que no conseguiría que abrieran la caja fuerte del lugar, saltó hacia la salida y comenzó a correr. En ese momento, su loca carrera fue su perdición, chocó contra uno de los anaqueles y cayó, ahí fue cuando la pistola que llevaba en la cintura —no se sabe si real o de juguete— se le escapó y fue a parar abajo del lugar de las revistas. El sujeto se incorporó y arrancó de nueva cuenta su huida, pero uno de los empleados, que todo el tiempo estuvo fuera de la vista del ladrón, le hizo una zancadilla, así el maleante azotó y se golpeó con el tubo de contención de choques del estacionamiento. Ese fue el momento cuando los empleados, clientes y algunos curiosos que pasaban por el lugar aseguraron a Julio Paz, minutos después llegaron policías municipales a bordo de la patrulla P-514 y detuvieron al sujeto, pero al encontrarlo golpeado por la caída, esperaron el arribo de paramédicos de la ambulancia 041 del Consejo Estatal de Seguridad Pública (CESP) 066, quienes atendieron al delincuente para curarle las heridas. Después fue trasladado a las instalaciones de la Dirección de Policía Municipal en Rancho Colorado, donde se informó que el hombre fue remitido ante el agente del Ministerio Público por el delito de robo calificado en grado de tentativa.
Muy mala pata tuvo un caco que asaltó un establecimiento OXXO la noche del viernes. El ladrón, al intentar la huida, tropezó en dos ocasiones, en la última golpeó su cara en uno de los postes contra choques que están en el estacionamiento de la mencionada tienda, al quedar noqueado, los clientes y dependientes de la tienda lograron detenerlo y entregarlo después a la policía. Los hechos tuvieron lugar la noche del viernes, poco antes de que ese día llegara a su fin. De acuerdo con las versiones extraoficiales, un ladrón solitario, que ahora sabemos se llama Julio Paz Mendoza, y que cuenta con 52 años de edad, llegó al establecimiento del OXXO del bulevar Valsequillo y privada de la 16 de Septiembre, de la colonia Las Palmas. Tras ingresar fue de manera directa al aparador donde estaban los empleados, los amagó con un arma, al parecer de fuego, y con ella les exigió que le dieran todo el dinero. Sin oponerse, lo obedecieron y le dieron el dinero de la caja registradora: entre 800 y mil pesos. El ambicioso sujeto no se conformó con ello, saltó el aparador y al estar del otro lado exigió a los empleados que abrieran la caja fuerte. Estos le contestaron que no podían porque no cuentan con las claves de acceso a la misma. El ladrón, al no creer en su palabra, colocó la pistola en su cintura y sacó de entre sus ropas una especie de lámpara que además sirve para dar descargas eléctricos. Con ese aparato dio una descarga eléctrica a una de las empleadas, a quien le colocó el artefacto en el abdomen. Al ver que no conseguiría que abrieran la caja fuerte del lugar, saltó hacia la salida y comenzó a correr. En ese momento, su loca carrera fue su perdición, chocó contra uno de los anaqueles y cayó, ahí fue cuando la pistola que llevaba en la cintura —no se sabe si real o de juguete— se le escapó y fue a parar abajo del lugar de las revistas. El sujeto se incorporó y arrancó de nueva cuenta su huida, pero uno de los empleados, que todo el tiempo estuvo fuera de la vista del ladrón, le hizo una zancadilla, así el maleante azotó y se golpeó con el tubo de contención de choques del estacionamiento. Ese fue el momento cuando los empleados, clientes y algunos curiosos que pasaban por el lugar aseguraron a Julio Paz, minutos después llegaron policías municipales a bordo de la patrulla P-514 y detuvieron al sujeto, pero al encontrarlo golpeado por la caída, esperaron el arribo de paramédicos de la ambulancia 041 del Consejo Estatal de Seguridad Pública (CESP) 066, quienes atendieron al delincuente para curarle las heridas. Después fue trasladado a las instalaciones de la Dirección de Policía Municipal en Rancho Colorado, donde se informó que el hombre fue remitido ante el agente del Ministerio Público por el delito de robo calificado en grado de tentativa. 
