Sangrienta jornada

Una aparatosa carambola acabó con la vida de tres personas y obligó el cierre de la autopista Puebla-Orizaba; en el Periférico un automovilista cayó de 40 metros  Víctor HERNÁNDEZ Orizaba, Veracruz.- En los límites de Puebla y esta entidad, un aparatoso accidente provocó el cierre de la autopista Puebla-Orizaba a partir de la caseta de cobro en Esperanza. Once vehículos resultados involucrados en tres percances registrados en menos de medio kilómetro. Tres personas murieron al instante y cuatro más resultaron lesionadas de gravedad. El auxilio A través del número de emergencias 066, Caminos y Puentes Federales (Capufe), recibió el reporte de una carambola en el kilómetro 227+500 de la autopista, a la altura de La Cumbre, zona en la que desde temprano se reportó una ligera llovizna e intensa neblina. Cuando los cuerpos de auxilio llegaron, la escena era trágica. Dos vehículos particulares estaban debajo de las cajas de dos tractocamiones de carga, que a su vez, habían colisionado uno detrás del otro. En ese lugar yacían los tres cadáveres que dejó el hecho. Pero según versión de agentes de la Policía Federal, el primer accidente fue el que protagonizaron una Ford Escape de color azul, con matrícula MPM 29-71 del Estado de México, que se volcó debido a que era conducida con exceso de velocidad, poco después la impactó una Jeep Patriot de color gris plata, con matrícula MPU 95-07, también de dicha entidad. Lo anterior provocó que los vehículos que arribaban a la zona se detuvieran por completo, entre ellos un SEAT Ibiza color vino, con placas de circulación MHS 91-27 del Estado de México, y un Nissan Sentra color beige, con placas MNC 69-24, que fueron impactados por un tractocamión. Se trató de un camión con matrícula 547 AR6 del Servicio Público Federal, propiedad de la empresa Transportes Navarrete, que los impactó a ellos y terminó incrustado en la caja de un tráiler Freightliner que transportaba miles de pollos vivos. Después un vehículo VW Passat de color negro y placas TWP 14-95 de Puebla, que era conducido con exceso de velocidad, quedó debajo del contenedor con pollos, debido a que el chofer no pudo controlar la unidad. Hasta entonces, se reportaban cuatro personas lesionadas, que fueron atendidas por paramédicos de Capufe y de la Cruz Roja delegación Tehuacán, que los trasladaron a un hospital en la población de Covadonga, perteneciente a Orizaba. Los muertos Pero entonces vino el accidente trágico, pues el conductor de un Ford Fiesta guinda, con placas 791 VEM del Distrito Federal, se incrustó de lleno en la parte trasera del camión de Transportes Navarrete; la unidad entró hasta la mitad, y los tres ocupantes murieron prensados al instante. Fue necesaria la intervención del personal especializado en rescate urbano de Capufe, que maniobró con equipo hidráulico y grúas para poder extraer los cadáveres de tres varones, que más tarde fueron identificados por sus familiares. Se trata de Esteban Durán Bernardo y Jesús Rosas Bernardo, ambos de 23 años de edad, el segundo en mención chofer del vehículo; y Alberto Durán Jiménez, de 42 años. Los tres eran familiares y tenían su domicilio en el municipio de Palmar de Bravo, estado de Puebla. Las diligencias del levantamiento de los cuerpos y las relacionadas con el accidente, quedaron a cargo de Rey Báez Andrade, fiscal en turno de la agencia especializada en delitos cometidos en carretera, con sede en Córdoba, Veracruz. Metros antes, se reportó la colisión de un Atos blanco, con placas TXV 94-31 de Puebla, una pipa y una Eurovan con rótulos de unidad piloto, que sólo dejó daños materiales. En punto de las 7:30 horas, instantes después del reporte, Miguel Ángel Ramírez, administrador general de Capufe para la caseta de cobro de Esperanza, ordenó el cierre de la autopista a partir del kilómetro 217, con la finalidad de evitar otra tragedia. Lo anterior provocó que el tráfico se hiciera intenso con sentido a Veracruz, que la fila de vehículos varados rebasara los 5 kilómetros de longitud y que vías alternas como la carretera federal también se saturaran. Aunque se tenía previsto que la circulación se reactivara a más tardar a las 13 horas, no fue sino hasta las 14 que se ordenó la apertura de la caseta. La rapiña Habitantes de la comunidad La Cumbre y automovilistas que estaban varados en el lugar de los hechos, llegaron hasta el tractocamión propiedad de la empresa Magdamex —la que transportaba los pollos vivos—, y mientras los cuerpos de auxilio trabajaban para sacar los cuerpos de las víctimas, ellos se apoderaban de los pollos que podían. Los escondían entre su ropa, en las bolsas de la sudadera, para luego retirarse del lugar, inclusive hubo familias completas que se los llevaron en las cajas que eran transportados, y así los metían a las cajuelas de sus vehículos.