Hacen barbacoa dentro de camioneta

Víctor Hernández Jorge FONSECA Lo que apunta a un posible ajuste de cuentas entre bandas dedicadas a la ordeña de combustible en ductos de Petróleos Mexicanos, cobró ayer la vida de dos personas que hasta el momento no han sido identificadas ya que no se pudo obtener la media filiación ni las características de su vestimenta; sin embargo, personal de la agencia del Ministerio Público de Tepeaca ya realiza las investigaciones de rigor. Los cuerpos de las víctimas fueron hallados al interior de una camioneta, completamente calcinados; de la unidad sólo se encontró la carrocería y aunque portaba placas de circulación, éstas resultaron estar sobrepuestas. Los hechos se registraron la mañana de ayer en inmediaciones de la población de Santa María Nenetzintla, que es junta auxiliar del municipio de Acajete, luego de que algunos campesinos de Hueyapan, Obregón y Tepetzala reportaran el hallazgo del vehículo. Elementos de la Policía Municipal de Acajete confirmaron el reporte tras arribar a inmediaciones de un camino de terracería que va de Nenetzintla a San Agustín Tlaxco, tras la revisión correspondiente hallaron en la cabina los restos quemados de dos personas. Al lugar de los hechos llegaron policías estatales y del Ejército Mexicano. Fue hasta las 15:10 horas cuando la agente del Ministerio Público, María Eugenia Flores, del distrito judicial de Tepeaca, junto con policías ministeriales y peritos, llevó a cabo las diligencias del levantamiento de cadáveres. Pese a que sólo se encontró la carrocería del vehículo, mediante otros medios de identificación se pudo determinar que se trató de una camioneta Ford Expedition que portaba placas de circulación PWE 69-32 del estado de Morelos. Una vez que consultado el numeral de las metálicas en las bases de datos, se averiguó que no correspondían al tipo de unidad, sólo estaban sobrepuestas, por lo cual no se descarta que además cuente con reporte de robo. Los cuerpos fueron trasladados a la morgue en Tepeaca, para llevar a cabo la necropsia de ley, aunque cabe mencionar que también se ordenaron pruebas de genética para poder identificar si son hombres o mujeres, la edad aproximada y quizá, la identificación; por ahora permanecen registrados como desconocidos. Hasta el cierre de esta edición se desconocía la causa de muerte de los dos occisos, es decir cómo los mataron, ya que se presume que fueron incendiados postmorten. Aunque no hay información sobre sus identidades, por la zona en fueron encontrados no se descarta que se trate de sujetos vinculados a bandas dedicadas al robo de combustible de los ductos de Pemex y que operaban en la zona de San Jerónimo Ocotitlán.
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