Una gresca armada entre huachicoleros y elementos de la Policía Municipal de Huauchinango dejó como saldo dos personas detenidas, mil 250 litros de hidrocarburo confiscado y cuando menos otra pareja de delincuentes que lograron huir en medio del bosque, al quedar atascada la patrulla de la policía. Todo sucedió la noche del pasado jueves, cuando personal de la Dirección General Comisaría de seguridad municipal recibió el reporte de dos vehículos que se encontraban aparcados cerca de la válvula número 5 de Pemex en Cuaxicala, donde hace 13 días los huachicoleros la dejaron abierta causando un gran derrame y potencial riesgo de conflagración. Luego del reporte, el mando implementó un operativo de búsqueda y la Policía Municipal salió hacia el lugar, pero no lograron ubicar a los vehículos. Al colocarse a lo alto del cerro, los chupaductos se dan cuenta cuando algún vehículo sube y esto les permite huir entre vericuetos que sólo ellos conocen. La búsqueda rumbo a la válvula continuó y sorprendieron a una persona que cargaba tres bidones, por lo que fue asegurado. El detenido dijo llamarse Florentino N, de 22 años de edad, y ser vecino de Ahuacatlán, comunidad de este municipio. Los policías continuaron con el recorrido pero su patrulla quedó atorada en un lodazal, ahí observaron que otras personas subían el cerro con más bidones, iguales a los que habían confiscado. Los policías les marcaron el alto, pero los infractores soltaron al suelo lo que cargaban y echaron a correr hacia el interior del bosque, fueron perseguidos por los policías y lograron detener a Modesto N, de 17 años de edad, el cual es vecino de Ahuacatlán. Fue en ese momento cuando compañeros de los dos detenidos, desde los árboles accionaron sus armas de fuego contra de los uniformados, quienes a su vez repelieron la agresión haciéndolos huir. La Policía Municipal aseguró más de mil 250 litros de hidrocarburo, distribuidos en cuatro garrafas de 30 litros, tres de 50 litros y 49 de 20 litros. Todos estos robos, comentan vecinos de la comunidad, "se debe a que ni la Policía Estatal, ni los soldados del Ejército ni el personal de Seguridad Física de Pemex, vigila el sitio y tampoco llegan cuando se da la voz de alerta, el único apoyo que tenemos en este lugar es el de la Policía Municipal", al reconocer su trabajo.
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