Familiares del joven Armando Juárez, estudiante de la Universidad Tecnológica de Tehuacán cuyo cadáver fuera encontrado el pasado 24 de septiembre en el municipio de San Francisco Altepexi, embolsado, con huellas de tortura y decapitado, permanecen en la incertidumbre, debido a que las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) no les han entregado el cuerpo para darle cristiana sepultura. A dos semanas de haber encontrado los restos del joven estudiante de Procesos Industriales, los peritos de la Fiscalía continúan los estudios para su plena identificación, ya que aún no ha sido localizada su cabeza y presuntamente sólo fue reconocido por una cicatriz que tenía en una de las piernas. Sería hasta mañana cuando las autoridades entreguen el cadáver a sus deudos. También lee: Los desaparecidos también van a la morgueEl director general de Gobierno, Marco Aurelio Ramírez Hernández, indicó que, ante esta situación, incluso la madre del occiso y dos familiares solicitaron al Ayuntamiento su apoyo, así como su intervención para agilizar la entrega del cuerpo. Mencionó que ya se hicieron las gestiones y se habló directamente con el fiscal regional, quien afirmó que la entrega de los restos del joven no depende de esta institución, sino de los peritos, y es de competencia del Tribunal Superior de Justicia. De acuerdo con el informe, se mandaron a hacer estudios de ADN, de los cuales esperan los resultados, para comprobar que se trataban del joven.
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