Exigen justicia por muerte de menor en San Francisco Totimehuacan, piden se investigue a fondo

Con la exigencia de justicia, este día familiares velaron a Juan Jesús, de 13 años, quien fue asesinado a golpes en la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacan.

También piden se investigue a fondo el caso pues consideran inocente a Gabriel, tío de la víctima, quien había sido señalado de ser el responsable del crimen por un pleito amoroso.

Los deudos aseguraron que el menor no tenía novia y tampoco se la había robado a su familiar y además no tenía problemas con nadie.

El velorio se realizó en el domicilio de sus padres, en la colonia Santa Catarina, en la citada junta auxiliar.

Cecilia, la madre del menor, dijo que su hijo no tenía problemas con nadie y no fue justa la forma en que se ensañaron con él.

Comentó que el lunes lo vio por última vez cuando fue a comer a la casa y alrededor de las 19:00 horas, se comunicó con él cuando había llegado a su domicilio.

Alrededor de la medianoche se enteró que su hijo llamó y mensajeó a Gabriel, diciendo que lo seguían dos sujetos, lo cual se le hizo raro pues siempre se comunicaba con ella.

Los padres indicaron que el menor vivía solo y rentaba un inmueble al dueño de la purificadora donde laboraba, situación con la que no estaban muy de acuerdo.

Incluso indicaron que tuvieron un desacuerdo con el dueño del lugar por rentarle una casa, siendo un menor de edad.

Gabriel, también se encontraba en el velorio y mencionó que el 10 de mayo tuvo un pleito con Juan Jesús, pero no fue por una mujer.

Dijo que días después solucionaron el conflicto e incluso platicó con la víctima la tarde del 17 de mayo y quedaron de ir a tomar en el tianguis el próximo fin de semana.

Señaló que su teléfono se quedó sin pila por lo que lo puso a cargar y alrededor de las 12:13 horas del martes vio el mensaje de su sobrino, que decía era perseguido por dos sujetos.

Luego de saber del hecho Cecilia, se comunicó con el jefe del menor quien indicó iría al lugar para saber qué pasaba, mientras la madre acudió junto con su esposo, Gabriel y otros familiares al lugar.

Reportes policiales refieren que el dueño de la purificadora pidió ayuda de unos policías que circulaban por la zona para acudir al inmueble, de las calles Pino Suárez y Leona Vicario.

Al lugar llegó el dueño del sitio y los policías y posteriormente los familiares, quienes señalaron no les permitieron el paso y no pudieron comprobar si el menor estaba muerto como decían los uniformados.

Se informó que la puerta del domicilio estaba abierta y al entrar encontraron al menor inmóvil, severamente golpeado y ensangrentado.

Los familiares aseguran que nunca llegó una ambulancia que corroborara el fallecimiento y por ello buscaban llevarlo a un hospital, pero las autoridades no lo permitieron.

Añadieron que las autoridades ministeriales no les informaron si faltaban pertenencias de la víctima u objetos de valor del inmueble y únicamente les dijeron que se comunicarían con ellos para darles avances en el caso.

Aunque trascendió una versión que señalaba al tío del menor como el responsable, la familia sostuvo que hasta que no se resuelva el caso y se demuestre lo contrario él es inocente para ellos.