El viernes pasado la entidad poblana registró un nuevo linchamiento. Esta vez fue en el municipio de Huauchinango, específicamente en la comunidad de Papatlazolco, en donde algunos vecinos decidieron linchar y quemar a un joven por, supuestamente intentar robarse a un menor. Y es que, en la comunidad se corrió un rumor por medio de Whats App, en donde se advertía a los padres cuidar a sus hijos, pues en la zona se encontraban roba chicos. 

Así fue que el joven Daniel Picazo de 31 años, quien fungía como asesor político y que era originario de la zona, y gustaba de visitar el lugar, fue interceptado por una turba de personas que acabó con su vida.

El gobernador Miguel Barbosa y el presidente del Congreso local, Sergio Salomón, reprobaron los hechos y pidieron a la ciudadanía en general no hacer caso de rumores, así como indicar que las autoridades resolverían el caso del joven. 

En este sentido, la titular de la Secretaría de Gobernación de Puebla, Ana Lucia Hill Mayoral, confirmó el registro de 11 intentos de linchamiento en lo que va de este 2022, sucedidos en el mismo número de municipios.

En conferencia de prensa, la funcionaria detalló que efectivos de la Policía Estatal y Municipal han rescatado a 15 personas y se tiene el registro de un fallecimiento.

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"Al corte de ayer se han registrado un total de 11 intentos de linchamientos, como resultado de la activación de los protocolos de acción se han rescatado a 15 persona y se tiene el registro de una persona fallecida", indicó.

Alarmantemente, Puebla cuenta con un viejo registro de casos de linchamientos. Recordemos que hace 54 años se registró uno de los linchamientos más sangrientos en la entidad poblana, de cual fue tanto su revuelo que trascendió más allá de los periódicos y se convirtió en una película, Canoa. 

El 14 de septiembre de 1968 es la fecha en que la junta auxiliar de San Miguel Canoa se tiñó de rojo, al ser partícipes en el linchamiento de jóvenes trabajadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), quienes fueron acusados de ser comunistas por parte del párroco de la localidad y brutalmente asesinados por parte de varios integrantes de la comunidad. 

Más de 50 años del caso y lo único que ha cambiado son las razones para linchar a un completo desconocido. Actualmente la premisa es el robo de menores. Tal y como pasó en 2018 cuando habitantes del municipio de Acatlán de Osorio condenaron a muerte a Alberto Flores Morales, de 53 años, y Ricardo Flores Rodríguez, de 21, a quienes los acusaron de intentar robar a menores de edad, por lo que decidieron lincharlos.

Alberto y Ricardo viajaban a bordo de una camioneta Ford, Explorer, de color negro y placas del estado de Puebla en la comunidad San Vicente Boquerón cuando habitantes los detuvieron y acusaron de robar niños.

Cabe señalar que Puebla, ocupó el segundo lugar nacional en linchamientos, esto según datos de la organización “Causa en Común”, quien reportó que, durante el 2021, Puebla registró 36 intentos de linchamiento, siendo el segundo estado con más eventos de este tipo solo por detrás de Oaxaca que acumuló 44.