“He alcanzado todas mis metas con mi estilo de gobierno”: Sergio Salomón Céspedes
Conciliador, pero firme, es la forma de gobierno que ha llevado a Sergio Salomón Céspedes a cumplir todas sus metas.
“A mí no me verás jamás inventando un delito a nadie… por supuesto que tampoco exoneraré a nadie ni le perdonaré ningún tipo de pecado, del tamaño que sea; quien la deba que la pague”, reconoció en entrevista para Póker de Ases el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes. Conciliador, pero firme, es la forma de gobierno que ha llevado a Sergio Salomón Céspedes a cumplir todas sus metas -según afirmó-, luego de 11 años donde la inestabilidad, la persecución, la represión y la aplicación de la ley a modo fueron el sello. En tan solo dos años, de 2022 a 2024, los presos que dejó el barbosismo lograron salir de la cárcel, los vetos informativos fueron levantados y se logró la reconciliación con empresarios, periodistas y sociedad civil. Atrás quedaron los tiempos de encono y de la mano de Salomón Céspedes se implementó una nueva forma de gobierno. A pregunta expresa del periodista Jesús Ramos, de cómo fue que eligió su estilo para gobernar, Sergio Salomón respondió que, primero que nada, lo que trató de hacer es no perder el piso ni cambiar su forma de ser. “La mejor forma de hacer gobierno es como si anduvieras todo el tiempo en campaña, porque es cuando sacas tu lado bonito, cuando eres gentil, cuando eres generoso, pero tienes que hacer una mezcla de firmeza y de estricto respeto al estado de derecho con la aplicación de la ley”, aseguró el oriundo de Tepeaca.
En algunas ocasiones, explicó, lo han cuestionado por su carácter conciliador, el cual podría llevarlo al extremo de temblarle la mano al momento de aplicar la ley. Sin titubeos, el mandatario contesta: “Cumple con lo marca la ley. Yo no me voy a fregar a nadie… se llama aplicación de la ley y no tengo que andarle mentando la madre a nadie para aplicarle la ley”. Si soy lo que soy, es porque tengo a GabyOtra forma en la que Sergio Salomón ha sorprendido es en el protagonismo y el respaldo público que le ha dado a su esposa Gabriela Bonilla, quien ha ejercido un rol activo en su labor al frente del Sistema Estatal DIF y en tan sólo dos años logró dignificar las casas de asistencia que permanecían en la carencia y el olvido. —¿Qué rol ha jugado en su forma de gobernar el desempeño de su equipo, pero sobre todo de Gaby Bonilla?—, le cuestionó el analista político Bruce Julis. “Si soy lo que soy, es porque tengo a Gaby, de eso no hay vuelta de hoja… El hecho de lo que hoy conformamos como matrimonio, como equipo de trabajo, con la misma visión, tiene que ver con la visión de mi esposa, donde hacemos un complemento y generamos condiciones”, respondió con la misma clama y el rostro tranquilo que mantuvo el resto de la entrevista. Un católico convenencieroAdemás de un hombre de familia, Salomón Céspedes ha dado muestras de ser un hombre de fe al anteponer en sus discursos y expresiones frases como “Primero Dios” y “Si Dios quiere”. Al ser cuestionado por qué lo hace. El gobernador aseveró sin titubear que no es por pose ni por estrategia, sino que es tan natural y tan normal como todos. “Si me dices qué tan católico soy, yo siempre he dicho que soy un católico convenenciero. Cuando necesito me acuerdo de Dios, cuando le pido su bendición vamos en el tema y cuando estoy en la fiesta ni me acuerdo”, respondió entre risas el mandatario de 55 años de edad. “No tienes por qué cambiar, tenía muy claro que esto se acaba… Yo reitero con todo respeto y, perdón, por la presunción, pero he alcanzado todas las metas con este estilo, generando diálogo y acuerdo, porque yo sí creo que la política es diálogo, es análisis y, si no puedes, vuelves a empezar… Que el poder sirva al pueblo y no para joder al pueblo”, ahondó, quien al momento de la entrevista portaba como accesorio un reloj con la imagen del dibujo animado Snoopy. Tras 55 minutos, llegó la seña del equipo de producción para concluir con la entrevista. En la pequeña oficina del CIS de la Atlixcáyotl, solo estábamos los entrevistadores, los camarógrafos, el director de Sicom, dos personas del equipo de Comunicación Social y el gobernador. Un vaso de agua para cada uno adornaba la mesa redonda, así como tres timbres para llamar a tres personas diferentes en caso del mandatario requiriera algo. |